El estudio anual “Small business, great opportunities” realizado por Sage a casi 12.000 pymes en todo el mundo, entre ellas a 1.000 en España, revela que las pymes españolas lideran el crecimiento a nivel mundial, en línea con las previsiones de organismos internacionales, como el FMI, que sitúan el crecimiento de la economía española en el 2,9% para 2024. Las cifras revelan que más de la mitad de las pymes españolas (58%) aumentaron sus ingresos en el último año, cifra superior a la media mundial situada en el 45% y por encima del 32% que lo hicieron en 2023. Es más, a 6 de cada 10 pymes españolas les ha resultado sencillo hacer crecer o escalar sus negocios, frente al 50% a nivel global.
Este crecimiento se ve reflejado en el optimismo que las pymes tienen sobre el éxito de sus negocios, que se encuentra en su máximo histórico, ya que casi el 86% de las pymes a nivel mundial confían en su éxito, frente al 80% que lo hacía en 2023. España, y por segundo año consecutivo, lidera también la confianza en sus negocios, con el 88% de las pymes confiando en el éxito de sus negocios y un 85% afirmando sentirse altamente satisfechas con su productividad, dando de nuevo la cifra más alta entre todos los países encuestados.
Los principales factores que impulsan esta confianza entre las pymes españolas son la mejora de su eficiencia operativa (52%), el aumento del gasto de los consumidores (51%), y la adopción de nuevas tecnologías (51%). Se prevé que este crecimiento continúe en los próximos 6 meses. Así lo cree el 78% de las pymes españolas, a pesar de que más de la mitad (60%) también cree que los costes aumentarán en el próximo año, aunque se mantienen optimistas.
La adopción de tecnologías digitales se ha convertido en un factor de crecimiento y está reportando importantes beneficios a las pymes. 9 de cada 10 pymes españolas consideran que invertir en tecnología es un factor importante para el crecimiento de sus negocios y para el 93% es una de las razones del aumento de sus ingresos. Esto explica que las pymes españolas sean las más propensas de todo el mundo a reportar beneficios de esa inversión en tecnologías, incluyendo la mejora de la productividad (57%), el impulso de la innovación (46%) y una mejor experiencia para sus clientes (39%).
Invertir en tecnología es ya una prioridad para las pymes españolas, que en su mayoría (86%) se muestran satisfechas con la variedad actual de competencias digitales que tienen sus negocios. Liderar esta digitalización está permitiendo también que las pymes españolas sean las más conscientes de que, invertir en tecnología les permite dedicar más tiempo a tareas creativas o de más valor para el negocio, algo que confirman el 78% de las pymes españolas, frente al 71% a nivel mundial.
Se prevé que la inversión en digitalización realizada por las pymes en los últimos años, sobre todo por las nacionales, continué al alza en los próximos 12 meses, ya que el 77% de las pymes españolas espera aumentar sus inversiones en tecnologías digitales, muy por encima del 65% de media mundial.
El papel de la Administración Pública, fundamental para superar barreras e impulsar la digitalización
A pesar de los buenos resultados y expectativas, las pymes siguen teniendo dificultades para hacer frente al aumento de costes. Las presiones financieras, incluidas los problemas de tesorería y liquidez, así como el aumento de costes operativos, son las principales preocupaciones para una de cada dos pymes españolas (57%). Otras preocupaciones son los incidentes de ciberseguridad (32%), la capacidad de contratar y retener a trabajadores cualificados (31%), y el acceso limitado a la financiación (29%)
La intervención gubernamental es esencial para hacer frente a estos obstáculos, mejorando el acceso a una financiación asequible y simplificando los procesos de facturación mediante su digitalización. El 39% de las empresas españolas que no confían en su rendimiento citan la falta de ayudas públicas como principal motivo de preocupación. Las pymes españolas demandan más apoyo gubernamental para sacar adelante sus negocios que sus homólogos a nivel mundial, considerando que el Gobierno debería dar prioridad a incentivos fiscales y desgravaciones (51%), aumentar el acceso a una financiación accesible (47%) y aumentar las oportunidades de formación y desarrollo de competencias (43%).
La factura electrónica es un área fundamental en el que los gobiernos pueden marcar la diferencia en su apoyo a las pymes. 8 de cada 10 pymes españolas apoya la introducción de medidas nacionales para la adopción de la factura electrónica, por encima de la cifra global que se sitúa en el 77%. Solo un 5% de las pymes españolas se opone a esta medida.
José Luis Martín Zabala, Manager Director de Sage Iberia, concluye: “Las pymes son la base de nuestra economía, fomentan la innovación, crean empleo y desbloquean el crecimiento económico. La confianza y crecimiento que estamos observando entre las pymes es un testimonio de su ingenio, resistencia y adaptabilidad. Los gobiernos tienen un importante papel que desempeñar a la hora de crear un entorno propicio para su desarrollo, mediante intervenciones específicas para facilitar el acceso a una financiación asequible y promover la transformación digital”.