RRHH Digital Casi el 20% de los jóvenes entre 18 y 24 años trabaja o ha desempeñado su último empleo sin contrato, mientras que casi el 44% lo ha hecho con un contrato temporal, lo que no es más que una constatación de otro dato: el 48,6% de estos jóvenes aceptaría cualquier trabajo y en cualquier lugar, aunque tuviera un sueldo bajo.
Se trata de las conclusiones de un estudio elaborado por el Centro Reina Sofía de Adolescencia y Juventud, bajo el título ‘Crisis y contrato social. Los jóvenes en la sociedad del futuro’, a partir de una encuesta realizada entre 1.000 jóvenes españoles entre abril y noviembre de 2012, que muestra así la merma de las exigencias y la reducción de las expectativas que está provocando la crisis en este colectivo.
En primer lugar, el hecho de que hasta un 24,2% no hubiera contado con un empleo hasta la fecha y que un 16,2% más sólo hubiera contado con uno, arroja perspectivas muy pesimistas, en tanto que un 56,2% de los encuestados cree que el alto desempleo juvenil se debe a que los empresarios se decantan por contratar a trabajadores con experiencia previa.
Además, el estudio señala que, de los jóvenes que logran un empleo, sólo un 23,6% consigue un trabajo indefinido, y más del 70% asegura que sus experiencias laborales guardaban poca o nula relación con sus estudios.
MIEDO A PERDER EL EMPLEO EN EL AÑO SIGUIENTE
Por otro lado, el 37,4% de los jóvenes creía muy o bastante probable perder el empleo en el horizonte de un año y, entre los que no contaban con un empleo en esos momentos, el porcentaje de los que veían entre nada y poco probable encontrar uno alcanzaba el 71%.
En este contexto, el informe concluye que un 48,6% de los jóvenes aceptaría cualquier trabajo, en cualquier lugar, aunque fuera con un sueldo bajo, el 61,7% ve probable que la situación le lleve a probar suerte en el extranjero, y casi un 20%, que no está dispuesto a abandonar España, sí aceptaría trabajos con salarios bajos y alejados de su profesión.
NO HAY ÍMPETU EMPRENDEDOR
Otro de los resultados más destacables del estudio se refiere a la motivación de los jóvenes a la hora de emprender. Así, sólo 2,2% de los jóvenes se encontraba o se había empleado como trabajador autónomo.
En paralelo, el 71% de ellos echa la culpa de su situación al Gobierno y los partidos políticos, un 39% a la situación económica y sólo un 5% busca las causas en los propios jóvenes.
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