El modelo cooperativo fomenta la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en el mundo laboral, ya que posibilita la autoocupación de la mujer, y la oportunidad de participar como socia, en la toma de decisiones empresariales, educación y formación y servicios y productos de calidad.
Ésta es una de las principales conclusiones de la ‘Jornada de Igualdad de Oportunidades en la Participación y Toma de Decisiones de la Empresa Cooperativa’, que se celebró el pasado jueves en Barcelona en el marco de la 84ª Edición del Día Internacional del Cooperativismo. El acto, –enmarcado en el programa ‘Equal RSE.COOP’ de Implantación de la Responsabilidad Social de la empresa cooperativa–, fue organizado por la Confederación de Cooperativas de Cataluña y la Federación catalana de Cooperativas de Enseñanza.
En el encuentro, que reunió a un centenar de representantes del entorno cooperativo y de otros ámbitos, se puso de manifiesto que el sector cooperativo «muestra sensibilidad y compromiso en relación a esta temática», y que en los últimos años ha llevado a cabo distintas iniciativas para promover la igualdad de género en sus organizaciones.
Así lo manifestó por ejemplo, la doctora en Ciencias Económicas y profesora del Departamento de Economía Aplicada de la Universidad de las Islas Baleares, María Antònia Ribas, que sin negar que tanto en la economía social como en las cooperativas «continúan existiendo algunos síntomas de desigualdad de género», apostó por este modelo amparándose en los principios de igualdad, equidad y adhesión voluntaria y abierta que lo rigen.
Según datos facilitados por Ribas, las cooperativas ocupan en España a una media de 42,9% de mujeres, si bien en algunos sectores como el sanitario (77,8%), enseñanza, (74,2%) y consumidores y usuarios (73,9%) la cifra es notablemente superior.
Ribas destacó, asimismo, que las mujeres que trabajan en una cooperativa «valoran muy positivamente las características de este modelo empresarial y las relaciones laborales y personales que de él derivan».
En la jornada participó también como ponente la experta en políticas de igualdad y conciliación de la vida laboral y personal, M. Glòria Llatser, socia directora de la consultora especializada ‘Optimiza’, que dio algunas claves para favorecer el acceso de las mujeres a la condición de socias y a los cargos de responsabilidad.
Teniendo en cuenta la segregación horizontal, dijo, «las mujeres sólo acceden a un tipo de actividad». En cuanto a la segregación vertical, recordó que las mujeres «sólo ocupan unos niveles determinados en las organizaciones», ante lo que propuso a las cooperativas que como primer paso midieran «cuál es su escenario real para tomar conciencia y poder gestionar la situación».
A partir de aquí, según Llatser, algunas pautas a seguir pueden ser la publicación de ofertes de trabajo en lenguaje neutro, acciones positivas de selección, pruebas de selección que no midan les condiciones personales, sistemas de promoción igualitarios, etc.
También añadió, que se tienen que considerar como factores claves en el fomento de la igualdad, «la formación, la promoción de las mujeres, y la aplicación en la empresa de medidas de conciliación de la vida personal y laboral».
POR ETICA Y POR PREPARACION
Ambas ponentes destacaron que el mundo empresarial tiene que incorporar a la mujeres a los cargos de responsabilidad, en primer lugar, por razones éticas y morales, «pero también por la preparación y la experiencia que la mujer tiene ya en estos momentos».
En el acto inaugural de la jornada, intervinieron el presidente de la Confederación de Cooperativas de Cataluña, Xavier Tubert, la presidenta del Consejo de Trabajo Económico y Social de Cataluña (CTESC), Mercè Sala, el director general de Economía Cooperativa, Social y de Autoocupación de la Generalitat de Cataluña, Santiago Esteban, el presidente de la Organización Internacional de Cooperativas Industriales, Artesanales y de Servicio (CICOPA), Javier Salaberría, y la gerente del instituto Catalán de la Mujer, Lucía Solís.
Los comentarios están cerrados.