Desde hace algún tiempo se viene especulando sobre la posibilidad de adaptar los horarios españoles a los europeos. Que el té de la zona euro no coincida con la sobremesa ibérica y que el café con leche de media tarde no suceda cuando de los Pirineos hacia arriba están cenando. Esta declaración de intenciones un tanto atrevida empieza a materializarse en propuestas concretas que revolucionarán hábitos y costumbres. Dentro de la Comisión de Trabajo y Asuntos Sociales del Congreso se creó un grupo encargado de redactar un informe sobre la conciliación de la vida laboral y familiar; para que los padres pasen más tiempo con los hijos o, sencillamente, para poder disfrutar de más tiempo libre. El informe, al que ha tenido acceso IDEAL, está previsto que se apruebe en febrero, cuando se reabra el periodo de sesiones. Entonces, el Gobierno dará cobertura a sus propuestas dentro de las leyes que se vayan redactando.
El texto plantea una reestructuración profunda de los horarios de trabajo y de los centros escolares, «lo que permitiría una mayor atención a los menores». Las actuaciones propuestas pasan por ampliar el horario de entrada a los colegios -«generalmente de 07,30 de la mañana hasta las 9»-, retrasar la hora de cierre y abrir los centros escolares y de educación especial durante las vacaciones. Del mismo modo, se sugiere que la jornada laboral concluya a las 5 o las 6 de la tarde, para lo que se opta por: «entrada temprana al centro de trabajo, reducir la pausa para comer, jornada continua y reducir el tiempo empleado en desplazamientos».
«Se pretende reestructurar los horarios, porque nos hemos dado cuenta de que están muy mal distribuidos», explica la diputada granadina María José Sánchez, portavoz socialista en la subcomisión que ha elaborado el informe.
Se plantean medidas para que, en el marco de la negociación colectiva, el trabajador pueda adecuar «la duración y distribución de su jornada». Entre otras acciones figuran: flexibilizar los horarios de entrada y salida, jornadas comprimida y continuas, facilidades para escoger días de permiso y vacaciones, posibilidad de reducir la jornada para atender a personas en situación de dependencia, o abrir los periodos de excedencia cuando sean necesarios para atender a un familiar. La subcomisión quiere acabar con las jornadas laborales eternas. Entre las medidas que propone en este sentido se contemplan controlar las horas de trabajo por parte de la Administración Pública y de las empresas o incentivar a éstas para que se valoren a los trabajadores por objetivos y no por su presencia en el puesto de trabajo. Otras medidas que incluye el informe que se votará en febrero pasan por aplicar jornadas intensivas en verano, acumular horas trabajadas los sábados para vacaciones e «intentar fijar un horario máximo a partir del cual las personas no puedan seguir trabajando».
Los comentarios están cerrados.