Según un estudio publicado por el INE, la masiva incorporación de inmigrantes a puestos de trabajo en España, a raíz de la política de "papeles para todos" llevada a cabo por el ministro Jesús Caldera, ha mantenido el PIB en cifras positivas pero ha hecho bajar los salarios y la renta. Esto se debe a que, a pesar de que "en muchos sitios estamos en situación de pleno empleo técnico", las incorporaciones al mercado de trabajo se producen por los inmigrantes en empleos de poca cualificación y salarios bajos. Esta situación provoca que la renta per cápita disminuya porque "somos muchos más para repartir sólo un poco más". Durante el Gobierno del PP el 80 por ciento de los nuevos empleos que se crearon se ocuparon por trabajadores españoles.
Los efectos que ha causado el increíble aumento de la inmigración en España, alentada por la ley de "papeles para todos" y "regularización masiva", llevada a cabo por el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, ha provocado efectos positivos en la economía Española, como el aumento del PIB. Pero, también ha incidido negativamente en las cuentas estatales, y más concretamente en la economía familiar que suscriben los ciudadanos españoles.
Frente al aumento del empleo preconizado por el Gobierno socialista y el ex asesor económico de Zapatero (ahora candidato a alcalde de Madrid), Miguel Sebastián, y los efectos positivos que el aumento de la inmigración ha tenido en la economía española, se alzan algunas sombras que afectan directamente al común de los contribuyentes. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la espectacular entrada de inmigrantes a nuestro país y su, no menos espectacular, incorporación al mundo laboral con la regularización masiva, ha provocado que disminuya el desempleo pero también ha tirado a la baja de las rentas y los salarios. Esto se ha debido a que la mayoría de esos nuevos empleos se han registrado requieren escasa cualificación, y por tanto, reciben una retribución mucho menor. Esto ha provocado que la renta y los salarios desciendan.
Durante las legislaturas en la que José María Aznar era el jefe del Ejecutivo, también se creó mucho empleo, pero en aquel entonces, cuatro de cada cinco contratos de trabajo era firmado por un español, y la renta per cápita subió en lugar de bajar, debido a que el número de empleos de baja cualificación eran menores. Según los datos facilitados por el INE, la población en 2006 alcanzó las 44.708.946 personas, unas 600.000 más que el año anterior y a la que es necesario sumar el cerca de un millón correspondiente al colectivo de inmigrantes sin papeles. Según los datos que maneja el PP, el PIB por habitante, que en 2005 se situaba en 22.000 euros, podría reducirse en 2006.
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