Están razonablemente satisfechos con la calidad de vida en la ciudad -la califican con algo más de un aprobado, en concreto un 5,33-, pero hay tres aspectos en los que encuentran deficiencias graves: los vallisoletanos suspenden los servicios municipales, las condiciones medioambientales de la capital y además opinan que en ella no existen suficientes oportunidades laborales, de acuerdo con los resultados de la última encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
El sondeo de la agrupación ha analizado los 11 factores que, a su juicio, más influyen a la hora de hacer agradable un núcleo urbano. Lo ha hecho a partir de las respuestas de 10.123 personas -2.900 de ellas españolas- de 76 poblaciones y cuatro países europeos: además del nuestro, Bélgica, Italia y Portugal. En el caso de Valladolid y en una escala de 0 a 10, la puntuación más baja es para el mercado de trabajo, que recibe un 4,4, que refleja que los habitantes de la capital perciben dificultades a la hora de encontrar ocupación remunerada. Y eso pese a que en mayo el paro registrado descendió en la provincia el 3,6 por ciento respecto a ese mes del 2006, lo que situó la cifra de desempleados en 23.4553.
El portavoz nacional de la OCU, Enrique García, asegura que ese desánimo sobre las posibilidades laborales explica que la ciudad ocupe un puesto mediocre, el undécimo, en la clasificación nacional. 'Es lo que ha contribuido a bajar a Valladolid del 'ranking', porque pondera mucho', indica, ya que supone el 15 por ciento de la puntuación total. Los otros tres aspectos que más pesan en el cómputo global son la seguridad (18 por ciento), la vivienda (13 por ciento) y la sanidad (12 por ciento), a los que los ciudadanos dan notas de un 5,8, un 7,3 y un 6,8, respectivamente. Esta última roza el aprobado, porque 'los técnicos sobrevaloran la salud y en esto ponen el límite en el 7,0'.
Los servicios que gestiona el Ayuntamiento -que ha eludido pronunciarse sobre el particular- también reciben una calificación baja, el 4,8, en consonancia con la percepción en otras ciudades de tamaño similar como Bilbao (5,0) y Las Palmas (4,1). El trío de aspectos que más descontento generan se completa con el medio ambiente (4,8), algo que achaca a 'la mala calidad del aire y del ruido' Miguel Ángel Ceballos, de Ecologistas en Acción, quien alerta de que 'solo tenemos detrás a Madrid y Barcelona'. Por eso pide 'reflexión a los responsables municipales' y aboga por 'reducir el uso abusivo del automóvil privado'.
Las otras materias que ha evaluado la OCU son la educación (6,8), el transporte y la movilidad (5,1), el paisaje urbano (5,7), la cultura, el ocio y el deporte (6,5) y el comercio y los servicios (7,5).
Oferta suficiente
A la vista de estos resultados, la abundancia y la variedad de establecimientos donde realizar compras es el aspecto mejor valorado. Esto, según el secretario general de Avadeco, Luis del Hoyo, 'confirma datos anteriores que indicaban el alto grado de satisfacción de los vallisoletanos con nuestro sector'. De ahí que abogue por 'reflexionar sobre la conveniencia de saturar la ciudad con nuevos centros comerciales'.
Por su parte el presidente de Fecosva, Javier Labarga, atribuye esa positiva percepción a que 'desde el 2000 se han hecho bien los deberes porque se ha invertido en informatización, formación, innovación y atención al cliente, algo en lo que hay que seguir mejorando', además de que 'ha venido mucha oferta del resto de España'.
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