El 52% de los alumnos de la Universidad de La Laguna (ULL) que terminan sus estudios consiguen un empleo en un puesto donde se requiere la titulación específica para su desempeño.
Este dato se refleja en un estudio del Gabinete de Análisis y Planificación (GAP) del centro académico tinerfeño, en el que se aborda el grado de satisfacción del alumnado egresado con relación a la titulación-mundo laboral, y que analiza el periodo que comprende los cursos académicos de 2002-2003; 2003-2004 y 2004-2005.
Este análisis, que contiene los últimos datos actualizados del ámbito laboral en el centro superior de Tenerife, revela que no se observan diferencias significativas entre hombres y mujeres durante los dos primeros cursos, aunque si hay una pequeña diferencia que se invierte a favor de las mujeres en el curso 2004-2005, donde se observa que el 57% de las egresadas desempeñan un trabajo con la titulación requerida, frente al 50,5% de hombres.
Además, en las mujeres se contabiliza un 11,8% de las que trabajan que sólo lo hacen con el requerimiento de una titulación universitaria, y un 30,6% donde no se requería titulación.
En el caso de los alumnos egresados, el 13,7% lo hacía en 2004-2005 con el requerimiento de un título universitario, y un 35,8% sin que se le reclamara una titulación específica.
En cuanto a las áreas de conocimiento en las que los universitarios consiguen un trabajo tras terminar sus estudios, destacan en los tres ejercicios que analiza el estudios del GAP la rama de Ciencias de la Salud, que llega a superar en todos los casos el 80%, así como en las Ciencias Técnicas, que se ha situado por encima del 70%.
Así, en el curso 2004-2005 en el área de Ciencias de la Salud se requería el título específico en el 89% de los casos, aunque el 8,6% no requerían titulación y el 2,5% sólo ser titulado universitario.
También en materia de estudios necesarios en el mercado laboral, el área de Técnicas en el curso 2004-2005 representaba el 78,8%, frente a las Humanidades, donde no se requería titulación universitaria en el 55,7%, frente al 17% de titulación universitaria y el 26% específica.
En cuanto a los sectores donde los universitarios desempeñaban su trabajo en el curso 2004-2005, destacan los que lo han hecho en el ámbito sanitario, veterinario y servicios sociales, el 17,9%; el 20,6% mujeres y el 12,6% hombre; en la Administración, Defensa y Seguridad Social, el 17%, de ellos 19% alumnos y el 11,7 alumnos; en Educación, el 10%, de los cuales el 13% eran mujeres y el 4,3% hombre, y en actividades inmobiliarias y de alquiler, el 9,3%, de los cuales el 7,7 chicas y el 12,2% chicos.
Público y privado.- Del nivel de empleabilidad de este alumnado, el 63% encontró una ocupación en el sector privado, mientras que el 30% fue en el público, donde se reflejó en el ejercicio de 2004-2005 una diferencia del 75% y el 56% entre hombres y mujeres en empresas privadas, mientras que en la Administración fue del 22,3% y el 34,3%, a favor de las alumnas que habían acabado sus estudios.
El análisis del ámbito de la empresa donde trabajan los egresados universitario por áreas de conocimiento se refleja una igualdad en todas, salvo en Ciencias de la Salud, donde es muy similar cuando se refiere al público o privado. Así, en este apartado, en el ejercicio de 2004-2005 estaban empleados en el sector de la Salud en 50% y un 46%, en la pública y privada, respectivamente. Mientras, en Técnicas, la diferencia era más notable, el 80,7% en el sector privado y el 18% en el público.
En Ciencias Sociales y Jurídicas el ámbito privado representó el 61,4%, frente al 28,3% del público. En Humanidades y Experimentales predominó el ámbito privado, con un 61% y un 65%, respectivamente.
Con relación a las funciones que han desempeñado o desempeñaban los universitarios en el momento de realizar el estudio, se estableció que las mujeres tienen los porcentajes más elevados en casi todos los tipos de funciones en la empresa. Sin embargo, los hombres destacan más en ocupaciones como la dirección y gestión comercial o logística. En las funciones desarrolladas por los alumnos que en 2004-2005, el 86,8% lo hacía en docencia, en el caso de las mujeres, mientras que los hombres representaban el 13%.
En asistencia médica y social el 78% de chicos y el 21,8% de chicas. En dirección y gestión el 78% de egresados y el 21,8% de egresadas, mientras que en comercial o logística eran el 67,9% de mujeres y el 32% de hombres. En las funciones no cualificadas se registró un 60% de mujeres y un 39% de hombres, mientras que en otras funciones cualificadas eran el 70 y el 29%, respectivamente. En Investigación y Desarrollo destacaron las alumnas, con un 70% frente al 30%.
Con respecto al tipo de contrato con el que contaban los alumnos que habían terminado sus estudios antes del ejercicio de 2004-2005 fue temporal a partes iguales. Así, en mujeres se registró un porcentaje del 52% y en hombres del 45,1%. Los contratos de este alumnado fueron fijos, en general, en el 13%. En las egresadas fue del 11,4% y el alumnos el 16,5%. Las relaciones laborales por obra o servicio ascendieron al 15,7%, que en el caso de las chicas fue del 15% y los egresados el 16,9%.
El motivo que facilitó la contratación de los alumnos fue en un 47% por la importancia de los conocimientos teóricos, que en mujeres se valoró en un 45% y hombres en un 44%. En cuanto a los conocimientos prácticos, influyeron en un 33,4%, que en hombres fue del 39,9% y en mujeres un 39,8%.
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