El número de desempleados en Alemania subió ligeramente en julio, respecto a junio, en 28.000 personas, debido a efectos estacionales, hasta situarse en 3.715.000, lo que coloca la tasa de paro en el 8,9 por ciento, el 0,1 por ciento más que el mes pasado, según la Agencia Federal de Empleo.
Con todo, y pese a este ligero aumento, el paro retrocedió en 671.000 personas con respecto a julio del pasado año, según el organismo con sede en Wiesbaden (oeste del país).
Para el presidente de la Agencia, Frank-Jürgen Weise, 'la positiva situación coyuntural se sigue reflejando en el mercado laboral', ya que el aumento de desempleados es inferior a lo habitual en esta época del año.
El aumento de desocupados en el 0,1 por ciento en julio se explica por los efectos 'estacionales', ya que en verano son muchas las empresas que dan de baja a jóvenes estudiantes de formación profesional.
Un efecto que se verá compensado nuevamente en septiembre y octubre, con la contratación de nuevos jóvenes.
En el Oeste de Alemania estaban registrados en las oficinas de empleo 23.000 personas más que en junio, pero 510.000 menos que el año pasado.
La tasa de paro en esta zona del país continúa en un 7,3 por ciento frente al 14,7 de sus vecinos germano-orientales.
Hace un año el índice de desempleo en Alemania era todavía del 10,5 por ciento.
Las cifras del paro superaron la barrera de los cinco millones a principio de 2005 por efecto estadístico de la reforma laboral del gobierno de Gerhard Schroder, que equiparó a perceptores de la asistencia social con los denominados desempleados crónicos.
El pasado abril, el desempleo se situó por primera vez en cuatro años por debajo de la barrera de los cuatro millones, en lo que se interpreta como consolidación de la evolución positiva del mercado laboral y de los efectos de las reformas puestas en marcha por el anterior ejecutivo.
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