Así lo avanzó ayer la secretaria de Empleo de UGT, María José del Valle, quien denunció la alta temporalidad que sufren los jóvenes de la comunidad y que alcanza a día de hoy al 90 por ciento de los contratos.
Una precariedad juvenil «que se ha convertido en norma, cuando por ley debería ser una excepción de la regla», ya que sólo un 4,7% de este colectivo presenta con un contrato indefinido, según apuntó. A su juicio, «nos encontremos con una situación de precariedad alarmante».
Emancipación juvenil. En este sentido, indicó que, a pesar de la mejora de la situación laboral de los jóvenes con respecto a la década de los ochenta, la alta temporalidad y los bajos salarios, unidos al elevado coste de la vivienda, hacen que sólo se hayan emancipado el 4% de los menores de treinta años de la región. Un porcentaje que, alertó, se mantiene «congelado» desde el ejercicio 2004.
Y es que, explicó, «pagar la hipoteca» absorbe en estos momentos más del 52 por ciento del salario juvenil en Castilla-La Mancha.
Encontrar el primer empleo es también un trámite cada vez más difícil en la región. Desde UGT se informa de que un hombre joven tarda una media de 3,5 meses en encontrar un empleo, la mitad del tiempo que gasta una mujer, cuya búsqueda del primer trabajo se eleva a 7 meses.
A esto hay que unir, según Del Valle, el hecho de que están dispuestos «a hacer lo que haya que hacer», algo que se traduce en que buena parte de estos jóvenes «renuncian a su cualificación profesional para tener un trabajo».
Exigir una trabajo mejor. Por todo ello, instó a los jóvenes a canalizar su descontento, que «no se conformen con lo que tienen y exijan una vida, un salario y un trabajo mejor».
En este punto, lamentó el alto nivel de desconocimiento que existe entre los más jóvenes de sus derechos laborales. Según afirmó, muchos jóvenes desconocen incluso qué es un convenio colectivo.
Por su parte, la responsable de Juventud de UGT en la región, Belén Zapatero, denunció que la precariedad laboral de los jóvenes se traduce en un mayor tasa de siniestralidad en este colectivo. En lo que va de año, el 37,36 por ciento de las víctimas de los accidentes laborales de Castilla-La Mancha tenían menos de treinta años.
En la región, la población joven asciende a 398.426 personas censadas hasta el 1 de enero de este año, de los cuales el 6,87 por ciento son extranjeros, según concluye el estudio presentado ayer por UGT con motivo de la celebración del Día Internacional de la Juventud.
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