El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, aseguró ayer que la propuesta de Bruselas de crear una 'tarjeta azul' -equivalente a la 'green card' estadounidense- para facilitar la entrada a la UE de inmigrantes muy cualificados "está bien fundamentada" y se mostró convencido de que se aprobará.
En rueda de prensa para presentar una campaña contra los accidentes laborales, Caldera subrayó que esta propuesta de directiva relaciona los flujos migratorios con las necesidades del mercado laboral europeo de incorporar mano de obra cualificada con todas las garantías. "Yo estoy convencido de que se va a aprobar, porque está buien fundamentada", manifestó el titular de Trabajo. La Comisión Europea presentó ayer esta propuesta, que persigue hacer frente a la escasez de mano de obra europea por el envejecimiento de la población. La iniciativa ya ha chocado con la resistencia de Alemania y Austria, que quieren mantener el control de la inmigración legal y no cederlo a Bruselas.
El objetivo de la 'tarjeta azul' es hacer más fácil la entrada y las condiciones de residencia para los inmigrantes cualificados que podrían luego desplazarse, bajo determinadas condiciones, a un segundo Estado miembro para trabajar, siempre que hayan pasado dos o tres años de residencia legal en el primer país.
La 'tarjeta azul' se limitaría a un periodo inicial de dos años, renovable, según ha explicado en diversas ocasiones el vicepresidente de la Comisión y responsable de Justicia, Libertad y Seguridad, Franco Frattini.
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