Melilla cerró el mes de octubre con un masa laboral de 14.968 trabajadores, de los que más de 2.000 poseen un contrato bonificado en lo que a las cuotas patronales se refiere, según datos facilitados por Seguridad Social. Estos incentivos empresariales favorecen la firma de contratos a personas incluidas en colectivos con una mayor dificultad de acceder al empleo. Así, las mujeres, los menores de 30 y los mayores de 45 años, los parados de larga duración, las personas en riesgo de exclusión social, las víctimas de violencia doméstica y los discapacitados cuentan con un importante aval para trabajar.
Aunque el grupo de trabajadores melillenses, con más de 4.000 casos, son los que disfrutan de un indefinido a tiempo completo de carácter ordinario, en lo que afecta a los bonificados hay que hacer mención al más de centenar de trabajadores minusválidos que trabajan a tiempo completo y los 23 que lo hacen a media jornada. Contrataciones que han sido efectuadas por 59 y 13 empresas, respectivamente.
Uno de los datos más reveladores con los que cerró octubre la Seguridad Social hace referencia a los contratos indefinidos que se transformaron de acuerdo a la política de fomento del empleo estable, con 654 casos en 209 empresas, partiendo de una jornada a tiempo parcial o uno temporal, y los que se han suscrito inicialmente como fijos, como se conocen popularmente, con 255 casos en 166 empresas.
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