El porcentaje de hombres duplica al de las mujeres en directores de pequeñas y medianas empresas y lo triplica en las grandes
La mitad de los parados dejó su puesto de trabajo el pasado año por la finalización de su contrato laboral o la falta de renovación del mismo, según se desprende de los resultados de las variables de la submuestra del año 2006 de la Encuesta de Población Activa (EPA) que publica el INE.
Sin embargo, el 13,2% de los parados fue despedido, el 3% abandonó su puesto de trabajo por algún tipo de enfermedad o incapacidad propia, el 2,8% dejó el trabajo para estudiar o recibir formación, el 1,5% por el cuidado de niños o de adultos enfermos, el 0,8% por otras responsabilidades familiares y el 0,3% se jubila.
En cuanto a las personas en activo, de la encuesta se deduce que la mayoría de los trabajadores españoles tiene jefe, pero no tiene subordinados, mientras que el 9,3% del total son trabajadores independientes, el 8,6% son encargados, el 6,6% directores de empresas pequeñas departamentos o sucursales, y sólo un 1,1% son directores de empresas grandes.
Por sexo y cargo, en el puesto de empleado hay mayor porcentaje de mujeres que de hombres (76,6% frente a 63,1%), mientras que el porcentaje de hombres duplica al de las mujeres en encargados o directores de pequeñas y medianas empresas y, prácticamente, lo triplica en el caso de empresas grandes.
En cuanto a las condiciones del trabajo, de la encuesta se deduce que una de cada tres personas trabajó al menos un sábado al mes en el 2006 y que un 13,2% acudió a trabajar dos o más domingos de cada mes, aunque el domingo es menos habitual.
Uno de cada diez ocupados de 2006 tuvo algún tipo de jornada nocturna, mientras que un 5,6% trabajó ocasionalmente por la noche y un 5,2% lo hizo más de la mitad de sus días de trabajo.
Según la forma de contratación, sólo el 4,2% de los asalariados de 2006 fue contratado a través de una empresa de trabajo temporal, mientras que un 3% obtuvo su empleo a través de la intermediación de una oficina de empleo pública.
En cuanto a la influencia de la especialización educativa en la participación en el mercado de trabajo, de la submuestra se deduce que la población de 16 y más años con enseñanza superior y formada en ciencias, mecánica electrónica, agricultura, salud y servicios sociales y servicios presenta unas tasas de actividad superiores al 80%.
PARO POR SECTORES.
Las tasas de paro más elevadas se registran en las personas formadas en servicios (10,3%) y en programas de formación básica y desarrollo personal (9,8%).
Por edad, las tasas de desempleo más altas se dan en el grupo de 16 a 24 años, especialmente en agricultura (30%), programas de formación básica y desarrollo personal (19,6%) y artes humanidades (19,4%). A partir de los 35 años no se observan tasas de paro superiores al 10% para ninguno de los sectores de nivel de formación alcanzado y destacan los bajos niveles en ciencias, educación y agricultura.
Los comentarios están cerrados.