El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, volvió a reiterar hoy el compromiso de la institución con su mandato primordial de velar por la estabilidad de precios y mantener la inflación por debajo y cerca del 2% en el medio plazo, así como la advertencia de que una espiral inflacionista en precios y salarios podría dañar la creación de empleo en la eurozona.
En el transcurso de su intervención en la XXV Ceremonia de los Premios Horizont celebrada en Frankfurt, el máximo responsable de la política monetaria de la eurozona, subrayó que los actuales niveles de precios se deben a los incrementos registrados por el petróleo, las materias primas, los alimentos y el efecto de los impuestos indirectos.
"Para reducir la inflación, de vuelta a nuestra definición de estabilidad de precios es esencial que no entremos en una espiral inflacionista en precios y costes laborales ante los actuales niveles de inflación, dando lugar a lo que denominamos 'efectos de segunda ronda'", dijo Trichet, quien además demandó a todos aquellos factores involucrados en la toma de decisiones debían de tener ésto en cuenta a la hora de actuar.
En este sentido, el presidente del BCE indicó que "cualquier decisión de aumentar los precios o los costes después de esta recomendación no hará otra cosa sino contribuir a una mayor inflación, restando poder de compra a medio plazo, reduciendo la competitividad y, de este modo, dañando de forma duradera el proceso de creación de empleo que actualmente es el mayor éxito de la eurozona".
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