El paro en la construcción es una de las consecuencias de la crisis inmobiliaria, un sector copado por los inmigrantes. En sus horas bajas se ha multiplicado el desempleo entre los extranjeros y miles de albañiles y peones se han tenido que bajarse del andamio.
Las obras paralizadas han dado paso a largas colas en el INEM. El número de parados extranjeros registrados durante 2007 creció un 24.5% respecto al año anterior.
De este número, más de la mitad de los desempleados procede de la construcción, un ámbito copado de inmigrantes que tienen ahora que buscar alternativas en otros sectores.
El Ministerio de Trabajo considera que este aumento del paro entre los extranjeros es algo momentáneo y que el propio sector lo reabsorberá durante los próximos meses.
Cataluña y Madrid son las comunidades que más parados han registrado seguidas de Valencia y Andalucía.
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