La transformación digital de las empresas es una transición necesaria para el futuro de la economía nacional. Para poder llevarlo a cabo, es necesario contar con perfiles con un alto componente de conocimientos científicos, matemáticos, tecnológicos y de ingeniería (STEM, por sus siglas en inglés) que impulsen proyectos internos para impulsar este desarrollo.
Esta es la principal conclusión de la masterclass «Los retos actuales de los profesionales STEM», organizado por IQS Executive Education el pasado 2 de junio e impartido por el Dr. Ricard Masip, profesor de IQS y director de RM Consulting con más de 20 años de experiencia como consultor en proyectos en consultoría estratégica en RRHH, Desarrollo Directivo y Transformación.
“Aunque el STEM es un concepto creado en la década de los 90, las nuevas tendencias obligan ahora a recuperarlo para gestionar el talento externo y replantear los modelos de negocio actuales por completo. El crecimiento de procesos de digitalización, comercio electrónico y robotización hace que estos perfiles hayan pasado a ser imprescindibles”, explicó Masip.
Ante esta demanda por parte de las empresas, Masip destacó la importancia en estos profesionales de altos conocimientos técnicos, pero también de competencias sociales, como un alto trabajo en equipos multiculturales y diversos, la flexibilidad a la hora de trabajar en proyectos y la colaboración en ecosistemas empresariales abiertos; así como habilidades más creativas.
Mayor demanda en las empresas, menor oferta en los centros académicos
La mayor demanda de perfiles STEM en el mercado laboral contrasta con la cada vez menor oferta formativa de estas disciplinas en los centros académicos. Sin embargo, Masip apuntó que la demanda seguirá creciendo a un ritmo de 150.000 puestos por año en esta década.
Esta disonancia hace que las empresas se encuentren con serias dificultades a la hora de buscar y contratar trabajadores expertos en STEM, ya que esta falta de formación se une a las pocas habilidades directivas necesarias que tienen para liderar la transformación digital desde un punto de vista estratégico.
“Las empresas ya no necesitan simplemente cubrir posiciones técnicas. Aunque estas posiciones aún existen y deben ser cubiertas, la necesidad de perfiles STEM responde a una nueva economía en la que estos trabajadores deben estar preparados a nivel formativo, pero también tienen que estar preparados para dirigir equipos y proyectos de mucha más envergadura. Son profesionales a los que se les pide integrarse mucho más en la estrategia y evolución de la compañía”, aseguró Masip.
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