La industria farmacéutica es uno de los sectores con mejor salud del tejido empresarial español y también de los más relevantes en inversión en I+D. De hecho, en los últimos cinco años se han acelerado el número de nuevos lanzamientos de medicamentos, con la dinamización laboral que eso comporta.
Además, las ventas de productos sin receta u OTCs en farmacia se han visto incrementadas por un mayor poder adquisitivo de la población, signo de la recuperación después de la crisis. Hablamos de todos los vinculados al autocuidado como la dermocosmética, suplementos vitamínicos, o asociados a periodos estacionales como los antigripales y antitusivos en invierno y los solares en verano.
Sin embargo, el sector farmacéutico tampoco se libra de los síntomas de desajuste entre la oferta y la demanda laboral que sufren otros sectores, aunque con sus propias particularidades. Si por ejemplo este desajuste entre la oferta de profesionales y las vacantes disponibles es el principal motivo de preocupación para las empresas en general (47%), seguido de la falta de profesionales cualificados (38%), según la Guía del Mercado Laboral de una consultora, para las farmacéuticas en cambio lo es la poca organización entre universidades y empresas (46%), dato relevante si se tiene en cuenta que una de las características de esta industria es la alta formación de sus plantillas: más del 90% son licenciados universitarios.
Las pharma no se libran de los problemas a la hora de contratar determinados perfiles, aunque esta dificultad es casi 10 puntos inferior (78%) a la tónica general del mercado laboral (87%). Los motivos por los que cuesta encontrar empleados cualificados también difieren, ya que el principal impedimento con el que se encuentran los responsables de Recursos Humanos de las farmacéuticas es el nivel de idiomas (57%), seguido de la falta de profesionales con el potencial adecuado (48%) y perfiles muy demandados en el mercado (43%).
Pese a la alta formación, al ser preguntados sobre si valoran más los estudios o la experiencia a la hora de seleccionar a un candidato, el 89% de los responsables de RRHH han primado la experiencia. Esto genera un mercado laboral particularmente endogámico, en el que el salario ofrecido por la competencia es la principal razón para el cambio, por lo que las farmacéuticas temen una fuga de talento (59%) superior al del resto de sectores (56%). El principal motivo es que algunos de los perfiles más demandados como Acceso al Mercado o Relaciones Institucionales tienen más barreras de entrada, ya que son posiciones sénior, con experiencia en el sector y muy formados.
Tal y como explican desde la consultora, “estas posiciones son muy estratégicas para las compañías farmacéuticas, ya que están muy vinculadas a los nuevos lanzamientos e inciden directamente en el negocio y el cumplimiento de los objetivos de la compañía. Son perfiles que no tienen entrada desde abajo, si no que se accede desde otros funciones dentro de la compañía, o desde la competencia”.
Esta vinculación con la estrategia de negocio y la escasa oferta de perfiles de Relaciones Institucionales y Acceso al Mercado (RIMA) hace que la retención de este talento sea también uno de los principales focos de los departamentos de RRHH de este tipo de compañías.
Entre las estrategias principales para captar y retener talento se encuentra la apuesta por la conciliación (94%), flexibilidad horaria (83%) y desarrollo de carrera (78%). No en vano, el sector farmacéutico es ejemplar en paridad e igualdad de condiciones. Se ha dado un cambio espectacular en los últimos años en este aspecto, todas las compañías han incorporado en sus planes iniciativas para cerrar la brecha. Hoy en día todas tienen muchas directivas, y gran parte de las directoras generales y CEOs en España lo son de empresas farmacéuticas o científicas.
Al margen de las posiciones concretas de RIMA, entre los perfiles más demandados del sector farmacéutico son los digitales, posiciones de nueva creación que, desde hace 5 años, se están abriendo para ayudar a digitalizar la industria. «Como en este caso no existen posiciones en la competencia que “robar”, este tipo de candidatos sí proviene de otras industrias, como gran consumo, alimentación o retail “, afirma el Business Manager de la consultora.
La figura del visitador de farmacia, otra de las posiciones más demandadas, también está experimentando algunos cambios. Si bien es una posición a la que se puede acceder desde abajo, incluso como prácticas universitarias, cada vez se está especializando más y se requieren perfiles más técnicos y científicos, por encima del tradicional don de gentes que se requería anteriormente. Aunque se ha producido un considerable recorte en las plantillas del número de visitadores, esta mayor especialización hace que sean posiciones demandadas que cuesta cubrir.
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