Las distintas generaciones conciben los espacios de trabajo de manera diferente. Según Ofita, mientras los Baby boomers se sienten más cómodos en oficinas con espacios más privados y silenciosos, los Millennials o Generación Y prefieren los ambientes colaborativos, abiertos, divertidos y donde la relación con sus jefes sea horizontal. Muestran una reacción favorable a la innovación, el diseño minimalista y a las buenas prácticas de responsabilidad social de las empresas. “Si se les contrata, de seguro buscarán las zonas de recreación, ya que recurren a ellas para inyectarse de energía”, comenta Martín López, director comercial de Ofita.
Por su parte, la Generación Y, totalmente acostumbrados al uso de las nuevas tecnologías, ya que nacieron con ellas, prefieren el encuentro virtual, buscan resultados inmediatos, —internet siempre ha estado para su acceso— y tienen una alta preocupación social, ya que han nacido en un mundo más tolerante y multicultural. “Al contratarlos, se les deberá brindar todas las herramientas tecnológicas que necesiten; e incorporar en entornos laborales colaborativos y diversos. De lo contrario, se sentirán deprimidos”.
“En el mundo actual, cada vez más diverso y cambiante, es necesario que las empresas se suban al carro de la gestión generacional y adapten las oficinas en función de las necesidades de cada grupo de empleados, seniors y jóvenes, para que todos se sientan a gusto en los ambientes de trabajo y, por ende, sean más productivos. Cabe destacar que aquellos más comprometidos con su lugar de trabajo son más felices y, por ende, responden siendo hasta un 30% más productivos”, recuerda Martín López.
¿Qué tipo de oficina buscan los más jóvenes?
Según Ofita, buscan oficinas colaborativas, informales, personalizadas, con acceso a la tecnología y con guiños al mundo del hogar.
1. Espacios colaborativos
Gracias a que gran parte de los empleados se sienten cómodos en ambientes colaborativos, donde se fomente el trabajo en equipo, la camaradería y las metas conjuntas, la tendencia es reducir las mesas asignadas a una sola persona. Esta idea tomará más fuerza en los próximos años, cuando los Millennials y Centennials dominen el mercado laboral. Ellos las consideran como requisito de un ambiente de trabajo ideal. Actualmente, se estima que las áreas colaborativas ya se han convertido en protagonista de los nuevos espacios, ocupando hasta un 65% de ellos. El porcentaje debería aumentar en el corto plazo.
2. Diseño personalizado
Las nuevas demandas laborales han impulsado que los diseños de los espacios de trabajo sean cada vez más consultivos. Esto significa que los empleadores ya no deben remodelar la oficina como una decisión unilateral y basada en las propias creencias, sino en base a las expectativas y necesidades de sus colaboradores, capacitándolos respecto de sus nuevas funcionalidades en caso de ser necesario. En este proceso se debe tomar en consideración las demandas de las distintas generaciones, pues no serán las mismas. Escuchar a cada trabajador es la clave.
3. Espacios de comunicación informal
Debido a la naturaleza cambiante de cómo, cuándo y dónde trabaja la gente, las organizaciones necesitan cada vez más espacios informales, donde las personas puedan tener reuniones, hacer llamadas privadas o simplemente dedicar tiempo para el ocio y la recreación. Su finalidad es la de fomentar la comunicación entre los empleados de distintas generaciones, a la vez de aumentar la calidad de vida en el trabajo. Tanto los Baby boomers como los Centennials agradecerán un lugar donde tomar un café o descansar unos minutos en un cómodo sofá. Mejor aún si éstos tienen tapizados únicos o combinaciones de distintos colores, ya que fomentarán un ambiente alegre y distendido que les permita romper la rutina.
4. El hogar en la empresa
Uno de los elementos que tienen todas las generaciones en común es que buscan sentirse a gusto en sus compañías. Aunque la generación tradicionalista y los baby boomers hayan crecido en espacios fríos, sin la personalización del espacio, se sienten conformes con el proceso de domesticación que estos han ido experimentando. Por su parte, la Generación X y Z considera normal que la oficina tenga guiños al mundo del hogar, pues lo asocian a una mejor calidad de vida y satisfacción. Para lograr la domesticación, se deben hacer cambios en la configuración y diseño del mobiliario, incorporando acciones simples como incluir cortinas, cojines y elementos decorativos.
5. Un pool de espacios
Pensando en atender las demandas de toda la organización, las empresas están dejando atrás la premisa de puestos personalmente asignados, dando cabida a un variado menú de zonas de trabajo, flexibles, donde todos los miembros tengan acceso a ellas. Emerge el desk-sharing, como se apoda a esta tendencia, principalmente entre los más jóvenes.
6. Acceso a herramientas tecnológicas
La evidencia indica que los colaboradores empoderados, aquellos que tienen un mayor acceso a sus aplicaciones deseadas y necesarias para trabajar, tienen el triple de probabilidades de aumentar su productividad. Por ello, es importante contar con espacios de trabajo conectados que faciliten el contacto virtual y el acceso a todas sus herramientas tecnológica.
Los comentarios están cerrados.