El Banco de España apunta que el 60% del empleo de las Administraciones Públicas españolas corresponde a las comunidades autónomas, con datos correspondientes a 2016, después de que haya elevado sus efectivos un 9% desde 2007, al sumar 137.000 personas.
Así lo recoge en un artículo analítico titulado ‘La evolución del empleo de las Administraciones Públicas en la última década’, en el que se explica que el gasto salarial de las Administraciones Públicas en España supuso en 2016 algo más del 20% de la remuneración de los asalariados del total de la economía, y un 25% del gasto público total, mientras que el porcentaje de asalariados públicos sobre el total de empleados de la economía se situó por encima del 15%.
El análisis, explicó el Banco de España, muestra que la dinámica del empleo público entre 2007 y 2016 fue heterogénea a lo largo del tiempo y por subsectores de las Administraciones.
De esta manera, «las políticas adoptadas en la última década han llevado a una recomposición del empleo público hacia un mayor peso de las comunidades autónomas, del empleo indefinido, y de los sectores de educación y sanidad pública», indica el Banco de España.
El supervisor detalla la evolución en la última década, para apuntar que el empleo de las Administraciones Públicas en España ha pasado por distintas fases.
En concreto, en los primeros años de la crisis económica reciente, entre 2009 y 2011, se produjo un «aumento del número de empleados públicos, a diferencia de lo ocurrido en la mayoría de países del entorno».
Este hecho fue el reflejo de algunas medidas de política fiscal contracíclica expansivas adoptadas en 2008 2009 y de la inercia derivada de las ofertas de empleo público de años anteriores, en la medida en que los procesos de selección y contratación se dilatan más allá del ejercicio en el que se convocan las vacantes, y a pesar de las restricciones paulatinas que se fueron introduciendo en la tasa de reposición y la oferta de empleo público desde 2009, expone el organismo.
La «intensificación» de dichas restricciones a partir de 2010, agrega el Banco de España, llevó a que el empleo público se redujera en 2012 y 2013, y se estabilizara en 2014. Finalmente, a partir de 2015 se fueron «relajando» las limitaciones a la tasa de reposición de efectivos, de manera que esta superó el 80%, en términos agregados, en 2016 y 2017, desde los valores «solo ligeramente» superiores al 5% registrado en 2012, 2013 y 2014.
COMUNIDADES AUTÓNOMAS
Por tipo de administración, el Banco de España señala que en el año 2016 el 60% del empleo de las Administraciones Públicas españolas correspondió a las comunidades autónomas, con 1,7 millones de empleados; el 21% a las corporaciones locales, con 600.000, y el 19% restante a la Administración Central (incluyendo Seguridad Social), con 540.000.
En este sentido, el supervisor indica que entre 2007 y 2011 el empleo de las comunidades experimentó un «fuerte incremento», del 17% en términos acumulados, que la posterior reducción en 2012-2014 «revirtió en gran medida», con una caída acumulada del 13% en dicho trienio.
En 2015-2016 el número de empleados de las comunidades repuntó «con cierta intensidad», registrando un aumento del 7%. De esta manera, entre 2007 y 2016 el sector de las comunidades «expandió» sus efectivos en cerca de un 9%, lo que equivaldría a unas 137.000 personas.
En el caso de la Administración Central y de las corporaciones locales, el aumento del empleo público entre 2007 y 2011 fue «significativamente» inferior al de las comunidades, del 5% y el 4%, respectivamente, y también lo fue el «inmediato» ajuste posterior.
No obstante, para estas administraciones el bienio 2015-2016 supuso una continuación del proceso de pérdida neta de empleos, de manera que en 2016 ambas presentaban un número inferior de empleados al observado en 2007, en un 7,8% y un 7,3%, respectivamente, lo que se concretó en unos 45.000 y 47.000 puestos menos.
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