Según los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) a los que ha podido acceder la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), en los primeros diez meses del año 2016 en total 32.593 beneficiarios de la prestación por desempleo optaron por ejercer una actividad por cuenta propia y para ello capitalizaron su prestación, bien como pago único, con cargo a cotizaciones o de forma parcial entre ambos modelos.
La gran mayoría lo hicieron para convertirse en trabajadores autónomos, el 84,84%, mientras que un 8,35 % lo hizo para crear una sociedad mercantil, elección que ha crecido de forma significativa desde que esta opción está prevista en la nueva legislación de fomento del autoempleo.
Siendo el número importante, sin embargo UPTA destaca que son tres mil menos que en el mismo periodo del año 2015, en el que lo hicieron 35.591. Para la organización, este dato demuestra que ha bajado de forma importante el nivel de cobertura de la prestación y también los periodos de disfrute, lo que hace menos atractivo el sistema de capitalización.
El importe total que el SEPE ha dedicado a este fin es de 336 millones de euros, cantidad superior a la del mismo periodo del año anterior que sólo llegaba a los 271 millones. La razón es que el periodo de capitalización que se solicita es mayor y la media por trabajador superior, así en 2015 la media por trabajador invertida fue de 7.613 €, mientras en 2016 asciende a 10.308.
Para Eduardo Abad, Secretario General de UPTA, “la capitalización sigue demostrando que es uno de los sistemas más eficaces para dar el paso del desempleo al trabajo autónomo, pero habría que potenciarlo con medidas da asistencia técnica y financiación complementaria”.
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