CC.OO. quiere ir más allá de la mera derogación de la reforma laboral y propone elaborar una Carta de Derechos laborales con rango constitucional, así como un nuevo Estatuto de los Trabajadores que incluya, entre otras cuestiones, un refuerzo de la protección por desempleo con mayores cuantías de prestación y un periodo máximo de cobro que pase de los dos a los tres años.
Estas cuestiones se incluyen en el documento ‘Propuestas de CC.OO para un modelo más democrático de relaciones laborales y un cambio en la política económica y social’, que ha presentado este lunes la cúpula del sindicato encabezada por su secretario general, Ignacio Fernández Toxo, coincidiendo con la convocatoria de las próximas elecciones generales.
Desde CC.OO. tienen claro, según Toxo, que «la reorientación del mapa político debería servir para reorientar a su vez las políticas económicas de los últimos años». El primer paso sería aprovechar una eventual reforma constitucional para crear una Carta de Derechos laborales, con rango de Ley Orgánica, que apuntale los derechos básicos de los trabajadores para ponerlos a salvo de ulteriores reformas laborales.
Esta carta debería tener, según el sindicato, once ejes básicos entre los que se encontrarían el derecho al trabajo como condición de ciudadanía, a una ocupación efectiva, a la salud y seguridad en el trabajo o a un salario digno y suficiente.
Pero además, CC.OO. quiere superar el Estatuto de los Trabajadores que se firmó en 1980 y elaborar uno nuevo que derogue las últimas reformas laborales e incorpore lo que consideran avances en los derechos laborales a partir de la negociación colectiva y de las sentencias judiciales en estos años.
«No decimos derogar la reforma laboral de 2012 para volver a la de 2010, sino establecer una carta para constitucionalizar los derechos laborales y elaborar un Estatuto de los Trabajadores a partir de la experiencia acumulada y las sentencias de los altos tribunales», ha explicado Toxo.
¿QUÉ INCLUIRÍA EL NUEVO MARCO LABORAL?
El detalle de la propuesta de CC.OO. apunta sobre todo a una mejora del sistema de protección frente al desempleo. Así, junto a un Plan de Choque para el empleo, la recuperación del poder adquisitivo perdido en los salarios, Toxo ha hablado, en primer lugar, de «apostar por un tratamiento radicalmente distinto del despido», recuperando el filtro administrativo en los despidos colectivos y «cuantías similares» a las previas a la crisis en el caso de las indemnizaciones por despido improcedente.
A continuación, en el caso de la prestación por desempleo, CC.OO. quiere que ésta se acerque en lo posible al último salario percibido por el trabajador, elevando los mínimos y máximos de la cuantía y extendiendo la duración del periodo de cobro de un mínimo de cuatro meses a los seis meses y un máximo de los dos años actuales a los tres años.
Asimismo, en el nivel asistencial, el sindicato persigue establecer un subsidio vinculado a políticas activas de empleo para personas que, aunque carezcan de cargas familiares, tienen un bajo nivel de empleabilidad.
También propone que los trabajadores a tiempo parcial que pierdan este trabajo cobren el subsidio en las misma cuantía que los trabajadores a tiempo completo o incluir en los subsidios a las empleadas del hogar. Finalmente, CC.OO. ha insistido en su apuesta por crear una Renta Mínima Garantizada.
PROPUESTAS DE EMPLEO Y FISCALES
Por otro lado, CC.OO. insiste en la necesidad de reforzar la causalidad de la contratación temporal elevando las sanciones cuando se demuestre un uso indebido de esta modalidad, de redefinir el contrato a tiempo parcial y de endurecer los supuestos en los que una empresa con beneficios puede aplicar despidos.
De la misma manera, el sindicato quiere dar la vuelta a la reforma laboral para que las empresas no puedan aplicar descuelgues en las condiciones laborales de forma unilateral, y reforzar el papel de la negociación colectiva.
En materia de pensiones, la central quiere revisar el mecanismo de revalorización de estas prestaciones para garantizar su poder de compra a lo largo del tiempo. Otras de las propuestas de CC.OO. se dirigen a la creación de una banca pública e impulsar un parque de viviendas de alquiler social.
¿CÓMO SE FINANCIA TODO ESTO?
Preguntados por cómo se puede financiar una mejora cuantitativa del sistema de protección social sin incurrir en un incumplimiento del déficit público, sobre el que Bruselas ya ha encendido las alertas, el responsable de Política Social de CC.OO., Carlos Bravo, ha respondido que, de entrada, esos objetivos de consolidación «son incumplibles y tendrán que ampliarse».
Pero además ha recordado que el gasto en protección por desempleo se ha reducido en unos 15.000 millones de euros durante la crisis pese al aumento del paro, porque muchos parados de larga duración han consumido este derecho y han pasado a cobrar el subsidio o quedarse sin ayudas. En este sentido, Toxo ha señalado que «se trataría de una recuperación del gasto en protección, no de un aumento».
Al mismo tiempo, CC.OO. cree que todos estos cambios se pueden financiar con una política fiscal «más coherente y más justa». En el caso de las pensiones, el sindicato propone un «incremento coyuntural» de los tipos de cotización por contingencias comunes, así como de las bases de cotización mínimas y máximas. También apuesta por financiar vía impuestos los gastos administrativos de la Seguridad Social.
Por otro lado, las propuestas fiscales de CC.OO. se dirigen a aumentar las bases imponibles en el IRPF, actuando sobre las reducciones y deducciones y la presión sobre las rentas del capital y elevar el tipo impositivo real en el Impuesto sobre Sociedades.
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