Si bien es cierto que internet nos ha abierto las puertas para acceder a un mayor número de ofertas de trabajo, los españoles aún pecamos de no saber aprovechar esas oportunidades. La tecnología nos presenta un abanico de herramientas en las que mostrar nuestro perfil profesional, como redes sociales o apps, pero acabamos por convertirlas en caballos negros, es decir, muchos estamos ahí pero pocos utilizamos su potencial.
Ante la consolidación de redes sociales, por ejemplo LinkedIn, como soporte esencial para la selección de talento y como vía con más proyección para la búsqueda de empleo, según un estudio publicado por Infoempleo y Adecco, es ahora cuando hay que prestar mayor atención si queremos mejorar la empleabilidad de España a través de estos medios. “Nos seguimos poniendo obstáculos ante las oportunidades de trabajo”, comenta Manuel Escarmena, cofundador de Masquelearning. Las tecnologías móviles son un aliado para la búsqueda de empleo y, por ello, hay que saberlas gestionar de manera adecuada para conseguir resultados más efectivos. De hecho, no llegamos a ser conscientes del impacto que estas herramientas tiene en los profesionales de recursos humanos y en los candidatos que buscan empleo: El 79% de los profesionales consideran que un candidato activo en redes sociales tiene más oportunidades laborales, según el estudio.
Desde Masquelearning, empresa que desarrolla experiencias formativas online y presenciales, recalcan cómo las redes sociales profesionales y aplicaciones móviles pueden ayudar a mejorar la empleabilidad en España y nos dan algunas claves para conseguirlo, como son, plantearse qué imagen muestro al mundo, qué objetivos quiero alcanzar, cómo pienso conseguirlos y cómo mido mi efectividad.
Algunos ejemplos de herramientas para encontrar empleo las encontramos en apps como Infojobs, Jobeeper, o Alertaempleo, y en redes sociales como LinkedIn, la cual Masquelearning utiliza en proyectos dirigidos a emprendedores, red de ventas y profesionales tanto en activo como en paro.
Internet puede ser una fuente de información inagotable pero también puede convertirse en un problema si no gestionamos adecuadamente la información que manipulamos. Debemos diferenciar los contenidos personales de los profesionales, que pueden afectar en la toma de decisiones de un reclutador, y no mezclar contactos en una misma red (LinkedIn, Facebook, Twitter), ya que cada una cumple una función específica.
Los comentarios están cerrados.