El Pleno del Congreso ha rechazado este jueves la solicitud de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) de acabar con las empresas de trabajo temporal (ETT), particularmente las que operan en el campo, y tampoco pedirá al Ejecutivo que refuerce los controles e inspecciones laborales, ya que el PP considera que lo que se está haciendo en esta materia es suficiente y está bien encaminado.
De este modo, el partido que da sustento al Gobierno ha votado en contra de los seis puntos incluidos en una moción de IU-ICV-CHA, resultado de una interpelación a la ministra de Empleo, Fátima Báñez, con la que se solicitaba prohibir las ETTs para acabar con la «cadena de explotación» de los trabajadores agrarios, fortalecer los servicios públicos de empleo, incrementar los recursos humanos y materiales de la Inspección de Trabajo, articular más mecanismos administrativos y de control para evitar el fraude, controlar desde la Seguridad Social y cruzar de datos sobre toneladas facturadas y jornadas de trabajo declaradas.
Aunque la propuesta, que fue debatida este miércoles en el Pleno de la Cámara Baja, ha conseguido el voto favorable de todas las formaciones de la oposición –salvo la propuesta sobre la prohibición de las ETTs, donde PSOE, UPyD, CiU y PNV se han unido al rechazo del PP–, la mayoría absoluta de los ‘populares’, junto con los votos de Unión del Pueblo Navarro (UPN) y del Partido Aragonés (PAR), han impedido que salieran adelante ninguno de los puntos, que se han votado por separado.
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