Durante el primer trimestre de este año, más de 200 mandos intermedios han sido formados por la consultora valenciana Equipo Humano a través de su modelo experiencial de liderazgo. Esta cifra refleja no solo un hito para la compañía, sino también un incremento del 14% en la inversión de las empresas en el desarrollo de este perfil clave con respecto al mismo periodo del año anterior.
En un entorno laboral donde los mandos intermedios están sometidos a una presión creciente, la propuesta formativa de Equipo Humano llega como respuesta a una necesidad urgente. Según una encuesta de Capterra el 75 % de los mandos intermedios se siente abrumado, estresado o directamente quemado por sus condiciones laborales. El 77 % asegura no haber recibido ninguna formación directiva antes de ser promovido, el 61 % no tiene tiempo suficiente para cumplir con sus tareas semanales, y el 51 % afirma que su jefe nunca o casi nunca se reúne con él para ofrecer feedback. Como consecuencia, el 24 % está buscando activamente otro empleo.
Frente a esta realidad, el modelo de Equipo Humano se basa en un enfoque práctico, experiencial y profundamente adaptado a la cultura y valores de cada empresa. A través de una metodología que combina dinámicas, simulaciones y reflexión aplicada, la consultora ofrece a los mandos una formación realista y transformadora, centrada no solo en habilidades, sino en visión de negocio, liderazgo coherente y comprensión del entorno empresarial.
“Liderar no es solo aplicar habilidades blandas. Es entender el negocio, tomar decisiones con criterio, inspirar, motivar y actuar con coherencia”, explica José Enrique García, CEO de Equipo Humano. “El mando intermedio es el verdadero motor del cambio. No podemos exigirle resultados si no le damos las herramientas ni el contexto para liderar bien”.
Durante las formaciones, se detectan una y otra vez carencias comunes: mandos que han sido promocionados sin saber si realmente deseaban asumir esa responsabilidad, sin formación en gestión de equipos, sin claridad en sus funciones, ni conocimiento de los indicadores clave del negocio. También se repite la dificultad de liderar a antiguos compañeros, la ausencia de preparación en delegación, comunicación y gestión de conflictos, y la falta de motivación real dentro de sus equipos.
“El gran error de muchas organizaciones ha sido pensar que cualquiera puede liderar con solo haber sido un buen técnico”, señala García. “Nuestra propuesta rompe con ese modelo. Diseñamos cada formación a medida, centrada en la realidad concreta del puesto, del equipo y de la empresa. Apostamos por un liderazgo que une resultados y humanidad”.
La metodología de Equipo Humano no aplica fórmulas universales, sino que responde a la necesidad de dotar a los mandos intermedios de visión, herramientas y seguridad.
Según García, “formar a los mandos intermedios no es un gasto, es una inversión estratégica. Si una empresa quiere transformarse de verdad, debe empezar por quienes sostienen su estructura cada día”.
Con más de 200 profesionales ya formados en tan solo tres meses de 2025, Equipo Humano refuerza su posición como referente nacional en el desarrollo del liderazgo intermedio. Su modelo apuesta por una formación vivencial, útil y conectada con el propósito real del rol.
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