La audiencia provincial de Darmstadt (Alemania) condenó ayer a dos altos ejecutivos de la multinacional Siemens a penas de dos años y nueve meses de cárcel, respectivamente, por haber sobornado con seis millones de euros a empleados del consorcio eléctrico italiano Enel para conseguir la licitación de unas turbinas. Además, Siemens tendrá que pagar al Estado una multa de 38 millones de euros en concepto de gravamen sobre la ganancia ilícita. Si Siemens no paga en 18 meses, uno de los condenados (a ambos se les dio la libertad condicional) tendrá que abonar al erario público 400.000 euros.
El primer proceso relacionado con los sobornos de la compañía Siemens, donde se constató la existencia de 420 millones de euros sin justificar en la contabilidad de la multinacional, cerró su primer capítulo ayer en Darmstadt. Pero el proceso seguirá en el tribunal federal alemán, ya que tanto los condenados como la fiscalía han anunciado recursos.
Andreas K., de 63 años, ex-jefe financiero de Siemens, mantenía una cuenta para sobornos en Suiza. Al jubilarse en Siemens y aunque ya estaba procesado, recibió 1,7 millones de indemnización para su retiro, cosa que el tribunal de Darmstadt criticó. El otro condenado, que responde al nombre de Horst V., antiguo ejecutivo de la multinacional y después asesor de la misma, tiene incluso la orden del mérito civil concedida por el Estado alemán.
Más investigaciones
El tribunal constató que la iniciativa de los sobornos partió de los ejecutivos del grupo energético italiano Enel. Los directivos italianos lo pidieron para conceder a Siemens la adquisición de turbinas por un montante de 450 millones de euros. Tras la mordida de seis millones de euros, la concesión fue coser y cantar.
En la sentencia, el juez recalcó que procedimientos como los sobornos empleados a través de cuentas en Liechtenstein y cajas negras en Zúrich "antes estaban relacionados con el tráfico de drogas y de armas, pero no con Siemens". La multinacional alemana explicó en un comunicado que solicitará una revisión de la sentencia, ya que consideró que "no se dan las condiciones para la ordenación del llamado decomiso por razones legales y reales".
Al margen de este procedimiento relacionado con contratos a Enel, la justicia alemana investiga otros supuestos sobornos llevados a cabo por trabajadores de la multinacional Siemens que, según la propia compañía alemana, podrían alcanzar un total de 420 millones de euros.
Los comentarios están cerrados.