Cada vez el mundo va más rápido, los hábitos y modas evolucionan a pasos agigantados y las empresas buscan seguir este ritmo frenético. Los directivos deben ser los potenciadores del cambio para ayudar a la compañía a atender las necesidades de los trabajos y a retener talento. Según datos del estudio realizado por INUSUAL, empresa de training y coaching especializada en liderazgo e innovación, el saber potenciar el talento (46%) es la cualidad más importante de un líder, seguido por la capacidad de escucha (16%) y predicar con el ejemplo (15%), respectivamente.
Por otro lado, saber delegar funciones con un 8,7%, la pasión por el trabajo y serenidad y persistencia, ambas con un 5,4%, y tomar decisiones acertadas bajo presión con un 2% se sitúan como las cualidades menos valoradas.
Según la encuesta llevada a cabo por la compañía, el 72,6% de los líderes afirman que los cambios los dos últimos años, a raíz de la pandemia, han sido positivos. Si bien han tenido buena acogida, cuando son de carácter social, solo un 66,3% creen que su empresa está alineada con ellos.
Con el objetivo de dibujar el perfil idóneo de un directivo/va capaz de liderar a un equipo de trabajo, los resultados son esclarecedores:
- Prácticamente todas las encuestadas/os (98,8%) consideran que los directivos/as deberían ser formados para atender correctamente a las necesidades de los equipos.
- Uno de cada dos (47,7%) creen que “saber potenciar el talento” es la cualidad más importante de un líder.
En cuanto a las necesidades de los trabajadores, los líderes encuestados consideran que las tres más importantes son la plena confianza en la empresa (53,6%), el sentirse escuchados (53,6%) y la flexibilidad de horarios (51,2%). Muy de cerca les siguen la motivación (42,9%), el respeto (39,3%) y el uso del diálogo para solucionar los problemas (23,8%).
Por último, a la hora de satisfacer a los trabajadores, solo un 35,7% consideran que “incentivar con el salario” sea realmente efectivo y, en cambio, ponen en primera posición, con un 84,5%, “saber conciliar las horas de trabajo con las personales”. En segunda y tercera posición le siguen “sentirse escuchados y apoyados” (51%) y “crear vínculo jefe-trabajador con el fin de aportar confianza” (54%). Los líderes creen que aportan mayor satisfacción las acciones dirigidas a mejorar el ambiente laboral y las relaciones con los jefes, muy por encima de las acciones de carácter económico.
“Los líderes ocupan posiciones clave para ayudar a las empresas al cambio. Además, en indispensable tener en cuenta las necesidades de trabajadores y trabajadoras para ayudar a crear equipos más fuertes. Para eso, es imprescindible la formación de aquellos que cuentan con poder de toma de decisiones. ”, comenta Pere Rosales, CEO de INUSUAL.