Pensaba que, como cofundador de una startup que está cambiando literalmente el modo de trabajar de las empresas, no tendría problemas a la hora de cambiar la mía. Me equivocaba.
Evidentemente, cada uno tiene la libertad de elegir cómo organizar su propio trabajo y las herramientas o estilo que mejor se adapten a él. Según los estudios se tarda aproximadamente 21 días en crear un nuevo hábito, y cuando hablamos de herramientas digitales, incluso menos.
El problema llega cuando necesitamos convencer del cambio a todo un equipo o incluso a una organización. Ya sean nuevas técnicas de gestión, comunicación, capacitación o retroalimentación, cuando hay muchas personas involucradas, las cosas cambian, y nuestra estrategia debe cambiar también. Aquí te muestro una serie de tácticas que he probado y aprobado a la hora de impulsar algún cambio en mi equipo:
1. Comunica claramente los beneficios
Lo más importante que deben entender las personas encargadas de implementar el cambio es el por qué necesitan este cambio. Por ello, construye tu mensaje tratando respondiendo las siguientes preguntas:
● ¿Cómo ayudará el cambio?
● ¿Cómo simplificará el trabajo el cambio?
● ¿Cómo les hará más eficientes el cambio?
2. Crea un cronograma
Ten en cuenta que, ya sea un mensaje largo y estructurado como un simple «A partir de mañana, usaremos la aplicación X», siempre se generará resistencia pasiva. En mi experiencia una manera de poner las cosas en perspectiva es dividir el proceso de adopción en pasos más pequeños y distribuirlos a lo largo de una línea temporal.
Asegúrate de comunicar todo muy claramente para que todos entiendan que ésta es una decisión que impacta la actividad del equipo a largo plazo. Ten confianza y explica tu visión a tu equipo para que puedan confiar en tí y en tu propuesta.
3. Explica cómo implementar el cambio
Es fundamental que expliques cómo funciona la nueva aplicación o cómo se implementará el cambio. Una breve sesión de onboarding, junto con un tiempo para dar espacio al aprendizaje práctico es imprescindible.Asegúrate de ofrecer ayuda y supervisión hasta que tu equipo se sienta seguro en el nuevo business as usual.
4. Encuentra embajadores
No estoy descubriendo la rueda cuando digo que debes conocer a tu equipo. ¿Hay alguien que ya haya implantado el cambio o la nueva herramienta? ¿Algún empleado que entienda especialmente la importancia de un nuevo estilo de trabajo? Identifícalos y solicita su apoyo, animando a otros compañeros a acudir a ellos en caso de que tengan dudas o se enfrenten a dificultades.
5. Evalúa la implementación
No me canso de ver grandes empresas que invierten largas sumas en soluciones digitales para subirse a la ola de las nuevas tecnologías, para descubrir que sus empleados no las usan, o al menos, no correctamente.
Tras un periodo de prueba, empieza a preguntar a tu equipo cómo se siente con el nuevo estilo de trabajo y qué aspectos hay que mejorar. Implementa las modificaciones que veas oportunos y verás un aumento en el ritmo de adopción.
Finalmente, trata de abordar el cambio con adaptabilidad y comunicación transparente. Y, si tus propuestas no son acogidas con el entusiasmo que esperabas desde el minuto uno, no te rindas.
Los comentarios están cerrados.