El compromiso de los empleados es una prioridad importante para las empresas de hoy, especialmente desde que los empleados trabajan desde casa debido a la pandemia de COVID-19. Muchos trabajadores están haciendo malabarismos con las numerosas distracciones que tiene en sus oficinas en casa, incluyendo el aumento de las responsabilidades como padres y el cuidado de la salud. Si bien el trabajo sigue siendo una prioridad importante, los directivos también deben preocuparse y asegurar el bienestar, la seguridad y la salud de sus equipos, yendo más allá de los básicos correos electrónicos y mensajes de texto y generando una verdadera conexión con sus empleados.
Desarrollar una conexión entre jefe y empleado es fundamental. El informe «Tendencias de Capital Humano en 2020» de Deloitte revelaba que el 79% de las organizaciones consideraba que fomentar el orgullo de pertenencia será clave para el éxito de sus negocios durante los próximos 12-18 meses, pero solo el 13% estaba preparado para hacer frente hacer frente a este desafío. Si bien los datos se publicaron antes de la pandemia de COVID-19, es probable que muchas empresas hayan acelerado el desarrollo de prácticas y programas para garantizar que los empleados sientan que sus necesidades están cubiertas.
Crear orgullo de pertenencia trasciende las tradicionales reuniones de compañía en verano de la empresa o el afterwork de los viernes. En tiempos de aislamiento, los líderes empresariales deben desarrollar empatía para que los empleados se sientan seguros, para que incorporen el bienestar en su ámbito laboral, y deben ser conscientes de la importante conexión entre el sentimiento de pertenencia de los empleados y su desempeño laboral, de la necesidad de que toda la empresa que se alinee con los valores fundamentales y el equipo se sienta cohesionado. Los programas variarán, pero pueden incluir bonificaciones con puntos, juegos de preguntas y respuestas, clases de ejercicios o happy hours en plataformas de videoconferencia, por ejemplo.
En estos tiempos de incertidumbre, los líderes también deberían considerar iniciativas de diversidad, igualdad e inclusión generar cohesión interna. Teniendo en cuenta la creciente heterogeneidad de los perfiles de clientes y consumidores, “reservar un asiento en la mesa” para perfiles diversos dentro de la compañía ayudará a construir puentes de confianza y conexión emocional en el equipo. Las investigaciones muestran que las empresas que tienen una diversidad superior a la media generan un 19% más de ingresos que las que no la tienen.
Los directivos están dirigiendo sus compañías y a sus empleados en un momento tan complicado que será recordado durante años. Cuando la pandemia de la COVID-19 termine, ¿qué legado habrán dejado estos líderes? Es el momento de ser empáticos y fomentar una confianza que rinda frutos en los próximos años.
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