Recursos Humanos RRHH Digital El Juzgado de lo Penal número 5 de Córdoba ha condenado a sendas penas de un año de prisión al gerente de una empresa de instalación y montajes eléctricos y un oficial de primera que controlaba el traslado de una viga de una obra en un camión y que cayó aplastando a un trabajador y acabando con su vida.
Así se recoge en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, y en la que se detalla que los acusados deberán abonar una indemnización superior a 100.000 euros por estos hechos, en los que participaron «directa y voluntariamente».
En concreto, la resolución judicial da por probado que sobre las 12,45 horas del 16 de junio de 2011 el trabajador estaba realizando las labores necesarias para el montaje del sistema de seguridad de una finca en la localidad cordobesa de La Rambla, para lo cual tenían que colocar en las cercanías de la vivienda de la finca unas vigas metálicas sobre las que luego poner un vallado y posteriormente unas cámaras de seguridad.
Además del empleado fallecido, estaban otros trabajadores en estas labores, en las que se habían trasladado de forma manual varias vigas desde la casa hasta donde se iban a colocar, a unos cien metros de distancia. Para continuar la realización del trabajo era necesario trasladar una viga de un mayor tamaño de alrededor 4,40 metros de largo y 150 kilos de peso.
Al frente de esta labor y dirigiéndola se encontraban los dos acusados, uno que «estaba dirigiendo todo el montaje de la instalación» y el otro que «se encargaba de dirigir de forma directa el traslado de las vigas». Así, los procesados decidieron que el traslado de esta viga de mayor tamaño se realizara en un camión, por lo que subieron la viga ayudándose de la grúa del camión al remolque del mismo, si bien el remolque era más corto que la viga y tuvo que colocarse «simplemente apoyada en la caja del camión sobresaliendo tanto por la parte superior como la inferior de la caja y sin sujetarla con cuerdas u otra forma que asegurara que no se moviera», indica la sentencia.
De este modo, uno de los procesados se montó en la cabina del camión y supuestamente permitió que el trabajador después fallecido se montara en la caja, tras lo cual circuló por un terreno irregular donde «al hacer un giro el camión, dado que la viga no estaba bien sujeta y que el trabajador estaba mal situado en la caja del camión, cayeron tanto el empleado como la viga que cayó encima», y le produjo «la muerte casi inmediata por lesión de centros vitales como consecuencia de traumatismo craneoencefálico severo».
Según la resolución, el fallecido realizaba su trabajo en esas condiciones, «con la tolerancia de los acusados, sin adoptar las medidas necesarias para que su labor la realizara de forma segura, sin asegurarse ninguno de los acusados que el traslado de la viga se realizara en condiciones para que no se moviera de la caja del camión o sin asegurarse tampoco que nadie se encontrara en el camión o cerca del mismo con el fin de que en el caso, como ocurrió, que la viga se moviera o cayera».
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