El Tribunal Administrativo de Francia ha comunicado a Easyjet y Ryanair que deberán aplicar el derecho laboral francés para regular la situación de sus empleados en el país galo. Además, cada una tendrá que abonar 2.500 euros en concepto de costas judiciales.
Con esta resolución, el Consejo de Estado francés descarta los intentos de ambas compañías de saltarse las leyes laborales francesas.
La plantilla que estas aerolíneas tienen instalada en Francia mantiene importantes diferencias laborales con respecto al personal de otras compañías aéreas: salarios inferiores, más horas de vuelo o menos horas de reposo, son algunas de ellas.
Ryanair ha advertido que la decisión tomada por el tribunal francés podría conllevar acciones legales próximamente. De momento, solicitará a las Cortes Europeas un documento oficial que demuestre que el ejercicio que ambas compañías han desempeñado en territorio galo es legítimo.
Las dos aerolíneas creen que esta medida atentaría contra las leyes del mercado libre europeo de servicios aéreos. 'Ryanair ha rechazado este decreto por considerarlo ilegal. Además, vulnera la libre competencia y la libertad de sistema' argumentó Jim Callaghan, secretario de la compañía irlandesa. 'Los consumidores franceses ya han sufrido bastante bajo el monopolio de Air France, y esta es una situación que está negándoles los beneficios de la competencia y de las tarifas bajas.'
Fue a principios de 2007, cuando Easyjet y Ryanair emprendieron esta batalla legal contra Francia para zafarse del nuevo derecho laboral francés, presente desde noviembre de 2006.
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