El encargado de una empresa de limpieza, que entre otros centros operaba en el Hospital Reina Sofía, ha sido condenado por el Juzgado de lo Penal número 4 de Córdoba a dos años de prisión y 24 fines de semana de arresto por un presunto delito de acoso y otro de abuso sexual continuado a una trabajadora.
El acusado, que durante la vista oral negó en todo momento los delitos de los que se le acusa -abusos, amenazas y lesiones a empleadas y absuelto de los tres últimos-, la única explicación que dio de las denuncias en el primer día de juicio es que las mujeres le denunciaron por «venganza laboral».
Desde 1997 a 2004
Sin embargo, el fallo considera probado que el acusado piropeaba y acosaba habitualmente a una empleada que le denunció y que trabajó entre el 20 de enero de 1997 y el 25 de septiembre de 2004 mediante once contratos sucesivos.
Según consta en la sentencia, a la que ha tenido acceso ABC, «ha sido esencial la declaración testifical de algunas trabajadoras, a juicio de la titular del juzgado, como el caso de una que no era compañera directa de la víctima, a la que sí les constaba las continuas peticiones del encartado de que «se acostase con él» bajo amenaza de no hacerla fija o de quitarle las renovaciones».
La víctima, por su parte, declaró en el juicio haber sufrido «a diario» una situación de acoso y que el motivo de no haber denunciado antes las supuestas amenazas y el acoso fue que «tenía miedo de que lo creyeran y de perder su empleo». Además, aseguró que habló con los responsables de la empresa sobre lo que estaba sucediendo, pero «hicieron caso omiso, e incluso se sintió humillada en el trato que le dieron». La mujer recalcó que «hemos sido acosadas psicológicamente todas las empleadas» y que el acusado le hacía insinuaciones y le exigía que su marido, amigo del procesado, le hiciera regalos. También relató como el acusado en varias ocasiones había aprovechado para «rozar sus genitales contra ella». La defensa del acusado recurrirá la sentencia ante la Audiencia Provincial.
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