Un reciente estudio elaborado por Fellowes revela que el 14% de los españoles no cumple con el RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) en su puesto de trabajo.
Han pasado ya varios meses desde que las empresas debían adaptarse e implantar el nuevo Reglamento en su actividad, concretamente la fecha límite fue el pasado 25 de Mayo, y los primeros datos son contradictorios.
Y es que si nos comparamos con el resto de Europa, los datos de España mejoran la media general en un 5% ya que en los países de la Unión Europea el grado de incumplimiento se eleva a un 18%.
Llama la atención el hecho de que aún un 13% de los trabajadores no ha recibido aún información sobre el nuevo Reglamento en su puesto de trabajo. Pero también estamos mejor posicionados que la media europea en este sentido, puesto que el 19% de los trabajadores de la UE también están faltos de esa información.
Dentro del estudio que presenta Fellowes, en el que se resalta la importancia de la política de protección de datos no sólo a nivel online e internet sino también a la documentación en papel y a la custodia de los mismos, existen datos que destacan la ausencia de destructoras de papel dentro de la oficina en el 19% de los casos del personal consultado.
En esta misma línea, el 33% del personal de oficina reconoce que no se deshace de forma eficiente y segura de la destrucción de documentos ya que sólo los rasga por la mitad y no los destruye completamente.
Sorprendentemente un 25% de las personas se lleva los documentos de trabajo a casa o los imprime en su hogar pero luego no se deshacen de forma eficiente y segura.
A nivel online poco más de la mitad de los trabajadores entrevistados, el 51%, informa de envíos de correo electrónico a la persona equivocada y un 65% reconoce recibir emails que no iban destinados a ellos.
En cuanto al comportamiento de los envíos casi el 36% de los trabajadores envía mails con copia (CC) en ocasiones en las que no debía hacerlo, en lugar de utilizar CCO. Esto implica que los receptores tienen visibles los datos de contacto.
Finalmente el estudio recoge otras variables como los olvidos de memorias USB con documentos confidenciales, un tercio de los consultados, y el olvido de documentos en espacios públicos, algo que han hecho el 16% de las personas entrevistadas.
Fellowes propone como solución a muchos de estos problemas la instalación de destructoras en el puesto de trabajo que permitan una destrucción efectiva de información confidencial en papel y el uso de filtros de privacidadinformáticos que respeten el RGPD. Ambas cosas, al alcance de prácticamente cualquier empresa en todos los sectores.
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