En España, el paro juvenil se situó en 24,9 %, según datos extraídos de la última Encuesta de Población Activa (EPA) del INE. Además, la edad media para conseguir el primer empleo se eleva hasta los 26,5 años, la más alta desde la Gran Recesión, según la Tesorería General de la Seguridad Social. En este contexto, ocho de cada diez Zetas universitarios contempla emigrar, según el “Informe Ruta 44: visión sobre el futuro laboral de los ‘Zetas’ universitarios”, un estudio realizado por The Onion Inside y promovido por BTOB y la Universidad Complutense de Madrid junto a sus partners Com2Be PR, The Cross y Marketing Directo. El informe quiere servir como base de lanzamiento de Ruta 44, el programa universitario que quiere cerrar la brecha entre formación y mercado laboral mediante herramientas y recursos prácticos adaptados a las necesidades reales de los jóvenes universitarios.
Este informe aporta una nueva visión sobre las expectativas de los jóvenes universitarios en lo relativo a su futuro laboral, así como las inquietudes y desafíos que enfrentan al finalizar sus estudios. Además, pone de manifiesto las nuevas exigencias formativas y profesionales de esta generación: mientras que el 58,3 % considera que el título es imprescindible para obtener un empleo —creencia que se debilita a medida que avanzan en sus estudios, pasando del 67,9 % en 1º curso al 54,2 % en 4º curso—, más de la mitad (59,3 %) lamenta que, tras graduarse, no saldrá preparado para enfrentarse al mercado laboral. Solo el 15 % se muestra optimista en este aspecto.
“Los datos reflejan la preocupación creciente de los estudiantes ante un mercado laboral que les exige experiencia sin ofrecerles oportunidades claras de conseguirla. Es esencial fortalecer los vínculos entre las instituciones educativas y las empresas para mejorar la empleabilidad de nuestros jóvenes. Hay que reforzar los programas formativos en prácticas y reducir ese 12,5 % de alumnos de 4º curso que no saben cómo ejecutar las tareas en sus prácticas en empresas”, declara Patricia Núñez, directora del departamento de Ciencias de la Comunicación Aplicada de la UCM.
Falta de formación práctica y acceso tardío a la experiencia laboral
Porque la mitad de los universitarios (49%) no ha hecho prácticas. En 4º curso, tres de cada diez estudiantes (31,3 %) siguen sin haber accedido ni siquiera a un contrato formativo, lo que pone de manifiesto la necesidad de unir universidad y empresa y permitirles aplicar de manera real y efectiva los conocimientos adquiridos. Tal y como explica Guillermo Lázaro, director general de BTOB: “Ruta 44 nace como una respuesta a la dicotomía entre la formación y el mercado laboral. No se trata de adquirir solamente conocimientos, sino de saber aplicarlos en un entorno profesional real. Nuestro objetivo es conectar a los estudiantes de nuestro sector de comunicación, marketing y publicidad con las empresas, proporcionarles herramientas y ayudarles a desarrollar las competencias que realmente demanda el mercado laboral”.
El informe refleja un cambio de tendencia generacional: a la hora de definir su futuro profesional y preguntados por sus prioridades, los ‘Zetas’ ya no buscan ‘big companies’ o multinacionales, sino que la mayoría elige las pymes como tipo de empresa perfecta para trabajar, concretamente las medianas de estilo familiar (36,3 %), seguidas de las pequeñas donde puedan obtener un crecimiento personal (19,3 %).
Preguntados por aquello que más valorarán en su próximo futuro laboral, las preferencias son claras: el sueldo (70 %), seguido de un buen ambiente laboral (58,8 %) y la posibilidad de participar en la toma de decisiones (58,3 %). Sin embargo, la filosofía vital de esta generación se observa en afirmaciones como que un 26,8 % que no aceptará trabajos que no ofrezcan flexibilidad y casi dos de cada diez (17,3 %) valoran las políticas de diversidad e inclusión en las corporaciones.
“Este estudio nos enseña cómo las demandas de los ‘Zetas’ están cambiando frente a las anteriores generaciones. Lo que más valoran, ante todo, es el salario, teniendo en cuenta todo lo que han heredado; ya no buscan solamente estabilidad laboral como antes, sino crecimiento personal y sentir que forman parte de una comunidad, optando por empresas pequeñas o medianas donde su voz tenga presencia y asuman responsabilidades”, añade Olga Diez, CEO de The Onion Inside.
El 82,2 % emigraría para un futuro mejor, en España no se apuesta por el talento joven
El conjunto de todos estos datos revela el hastío de la juventud española ante su inminente entrada al mercado laboral. El 71,5 % cree que en España no se apuesta por el talento joven y ve como salida la emigración: ocho de cada diez (82,2 %) contempla irse de España para conseguir trabajo, siendo Europa el destino más elegido (65 %), seguido de Norteamérica, con solo un 13,8 %. Los motivos son claros: se exige experiencia cuando no se da oportunidad de conseguirla (51,5 %) y hay que ser muy activo (formación complementaria y prácticas) para lograr trabajo (13 %). Además, el 27,8 % cree que no hay ninguna empresa que de verdad apueste por la incorporación de talento joven en sus equipos. Entre las que mencionan, destacan marcas como Inditex, McDonald’s o Mercadona porque “no exigen experiencia” o les “ofrecen puestos no cualificados”. Se trata de ‘minijobs’ que pueden compaginar con sus estudios universitarios.
El informe revela la necesidad de un cambio en el modelo educativo que se adapte a las demandas actuales del mercado y prepare a los estudiantes de manera efectiva para su futuro. Iniciativas como el programa formativo Ruta 44, enmarcado dentro de la ‘Cátedra Extraordinaria de Emprendimiento e Innovación’ de BTOB con el grado de Publicidad y Relaciones Públicas de la UCM, se imponen como una solución para ofrecer herramientas y experiencias que mejoren la empleabilidad de la generación zeta.
“Impulsamos esta cátedra con una convicción clara: crear un espacio de aprendizaje práctico y crítico donde los estudiantes puedan prepararse para los retos reales de su futuro profesional. Supone un compromiso real para transformar la relación entre estos estudiantes y las empresas, actualizando y asegurando los conocimientos prácticos para que estén al mismo nivel de los teóricos”, concluye Lázaro.