En tiempos de pandemia el mundo entero se ha visto en la necesidad de transformarse a sí mismo y a la población en general cambiando hábitos, comportamientos y prioridades.
Soportar tanto tiempo sin continuar la productividad económica de un país resulta un desafío imposible de cumplir especialmente cuando cada trabajador presenta una necesidad individual al otro. Trabajar desde casa o como se le reconoce mundialmente, el “teletrabajo”, no es más que la oportunidad de laborar a distancia a través del uso de herramientas telemáticas, siendo tendencia durante la “nueva normalidad” provocada por el confinamiento.
Pensarás que trabajar desde casa puede resultar un arma de doble filo, pero la realidad es que existen muchos beneficios tanto para el contratante como para el contratado. Cosas como la inclusión y la flexibilización de horarios, la creación de equipos multidisciplinarios, y un amplio abarcamiento en los perfiles a contratar son algunos de ellos.
Sin embargo, el factor clave de todos los trabajos (los presenciales y los teletrabajos) es, y será siempre la formación del aspirante. El poder de diferenciarte entre todos los aspirantes a un cargo se ha convertido en el factor determinante para la obtención del trabajo esperado. Es necesario entonces día a día buscar herramientas que nos permitan ampliar nuestro curriculum, haciéndonos destacar entre los demás.
En el entendimiento de que es una situación difícil para el mundo y que por los momentos el hacer acto de presencia en institutos o academias de formación representa un riesgo, se introduce el concepto de teleformación. ¿Has escuchado hablar de ella? -De la misma manera que se puede trabajar a distancia, también se puede realizar una formación a distancia. Esto siempre ha existido, ya que no todas las personas tienen disponibilidad de horarios para hacer actos presenciales en las instituciones. El mundo ha evolucionado y en la actualidad llevar una formación online o teleformación goza de una mayor accesibilidad (especialmente en tiempos de pandemia).
Consiste en tener acceso a una plataforma o aula virtual desde cualquier sitio, hora o dispositivo a través de una conexión a internet. En la Teleformación encontrarás tutores, guías, reducirás costos de aprendizaje y te permitirá llevar tu formación en paralelo con algunas otras actividades de tu interés. Uno de los beneficios es que contarás con acceso permanente al material de estudio y tú mismo podrás programar las clases en el horario que tengas disponible para ingresar a la plataforma virtual.
No existe limitante en cuanto al tipo de formación que deseas, encontrarás desde cursos de inglés para empresas, talleres de cocina o diseño gráfico, hasta certificaciones en manejos de software. Cada plataforma virtual es de fácil manejo, completamente adaptativa y te dará igual o mejores resultados que las clases presenciales (dependiendo de tu nivel de compromiso).
Auto-evaluaciones que comprenden ejercicios y prácticas, temporización lo cual te impide avanzar a un próximo nivel sin haber culminado de manera satisfactoria el anterior, así como calendarios académicos donde se establece la pauta o el ritmo que el curso llevaría son tan solo algunas de las herramientas que te brinda la teleformación.
Los comentarios están cerrados.