Los estudiantes se muestran considerablemente optimistas acerca de la tecnología como catalizador para su experiencia y vida laboral. Esperan que tenga un efecto notable y positivo en sus trayectorias profesionales, y más de la mitad prevé que cambiará radicalmente el trabajo que llevarán a cabo. Estas son algunas de las conclusiones del informe realizado por KPMG a partir de la sexta encuesta anual a los alumnos de las universidades más prestigiosas del mundo, que han participado esta semana en la final del KPMG Internacional Case Competition (KICC) en Kuala Lumpur, Malasia.
Frente a los posibles temores de que la tecnología pueda reducir o eliminar oportunidades laborales, los 88 finalistas de las ramas de empresariales y STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) procedentes de 22 países diferentes que han participado en la final del KICC demuestran una gran seguridad al afirmar que la tecnología planteará nuevas posibilidades en sus trayectorias profesionales.
Una parte de los universitarios (35% ) espera que les permita realizar un trabajo que genere valor o tenga mayor impacto, mientras que el 21% estima que le brindará una oportunidad para centrase en un trabajo más interesante. Seguido del otro 20% que afirma que les proporcionará desarrollar constantemente sus habilidades y capacidades.
En opinión de Segor Teclesmayer, socio responsable de People de KPMG en España, “los universitarios reconocen la increíble oportunidad que la tecnología y la digitalización, como la inteligencia artificial (IA), el blockchain y la robótica, pone a su alcance. Adoptar ese espíritu pionero y emprendedor es fundamental para crecer en nuestros mercados. Su capacidad para dominar las nuevas tecnologías en fases tempranas les facilitará aún más la resolución de problemas complejos en el mundo, ya sea en el plano empresarial o en el conjunto de la sociedad”.
De la encuesta de este año, se desprende también que las tres tecnologías con mayor influencia en sus carreras profesionales en los próximos diez años son IA con un 81%, que incrementará el nivel de responsabilidad para los recién licenciados, mientras que un 59 % aludió a la robótica.
También reconocen que existen capacidades y valores clave en el plano no técnico que serán fundamentales en el entorno laboral del futuro. Casi las dos terceras partes de los estudiantes (61%) clasificaron la resolución de problemas como la habilidad más importante, seguida de la capacidad de aprendizaje (49%) y la creatividad (39%). Los valores que clasifican como los más importantes incluyen la ética con un 58%, la responsabilidad (52%) y la integridad con un 41%.
“La importancia de las capacidades y valores no técnicos realmente aumentará en un mundo cada vez más orientado a la tecnología. Los alumnos entienden y reconocen que existe una gama de capacidades fundamentales que sentarán las bases de su trayectoria profesional, independientemente del efecto que tenga. Entre las que se encuentran, más allá de las tres primeras, la comunicación, la capacidad para entablar relaciones y la toma de decisiones”, aseguró Segor Teclesmayer.
Final de la competición de Talento Internacional de KPMG
Los resultados de esta encuesta se han dado a conocer durante la final internacional del KPMG International Case Competition (KICC) de 2018, celebrada durante esta semana en Kuala Lumpur, Malasia, y en la que el equipo de Alemania resultó ganador entre un total de 88 participantes, entre ellos, el equipo español ganador de la final nacional del KICC celebrada en Madrid el pasado mes de febrero, formado por cuatro estudiantes de la Universidad de Deusto.
KICC es una competición empresarial de estrategia y visión de negocio en el que, a lo largo de distintas fases eliminatorias y utilizando casos similares a los empleados en las escuelas de negocio, los participantes se enfrentan a diferentes situaciones empresariales problemáticas y han de defender posibles soluciones ante un panel de jueces expertos.
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