CC.OO. tacha de «fracaso» la reforma urgente del sistema de Formación Profesional para el Empleo (FPE), tras dos años de su aprobación, y denuncia que el Gobierno busca apropiarse de los fondos de la cuota de FP y expulsar a los agentes sociales de los órganos de decisión sobre esta materia.
Precisamente esta semana CC.OO. y UGT han mantenido reuniones con los grupos parlamentarios de Unidos Podemos, PSOE y ERC, que se han mostrado «muy receptivos» a las propuestas sindicales, orientadas a conseguir una formación para el empleo que ayude a «formar a los trabajadores menos cualificados, atienda las necesidades de las empresas, contribuya a aumentar el nivel educativo de los jóvenes y que esté basada en la cooperación, la negociación colectiva y el diálogo social».
En una nota, CC.OO. señala que todos los grupos políticos (con excepción del PP), los empresarios y las organizaciones sindicales coinciden en el «rotundo fracaso» de la reforma de la Formación para el Empleo emprendida por el Gobierno.
CC.OO. critica que la llegada al poder del PP significó una «drástica» reducción de los fondos destinados a la mejora de las cualificaciones de ocupados y desempleados y la modificación unilateral del sistema de FPE, y que dos años después de haberse aprobado la reforma, no se ha publicado ninguna de las normas de desarrollo previstas y se vive una situación de «transitoriedad y desorden muy graves».
Entre 2012 y 2016 los excedentes de los presupuestos de FPE de gestión estatal no destinados a formación han ascendido a más de 1.000 millones de euros, a los que habría que añadir los importes no ejecutados en las comunidades autónomas, según CC.OO.
Tanto empresarios como sindicatos han recurrido a la Defensora del Pueblo para obtener información, que aseguran que el Ministerio de Empleo les ha negado, sobre el destino de los remanentes de la cuota de Formación Profesional.
MENOS MUJERES Y JÓVENES EN CURSOS DE FORMACIÓN
«Mientras el resto de países de la UE-18 intensifica sus esfuerzos por adaptar las cualificaciones y competencias de su población a las exigencias de los cambios del sistema productivo, en España, por primera vez en más de una década, ha descendido el porcentaje de personas que realizaban actividades de formación permanente», denuncia.
Asimismo, CC.OO. advierte de que ha descendido también la proporción de jóvenes y mujeres que realizan cursos de formación y más de 100.000 pymes han abandonado el sistema de bonificaciones a la formación, que experimenta un descenso continuado desde 2013.
Por otro lado, las organizaciones sindicales y empresariales han llevado a los tribunales su exclusión del órgano colegiado que emite informe sobre las propuestas de financiación de los planes de la oferta formativa de la convocatoria 2016.
El secretario confederal de Formación de CC.OO., Javier López, señala que el Gobierno tiene como «único propósito» apropiarse de los fondos de la cuota de FP y expulsar a los agentes sociales de los órganos de decisión sobre esta materia.
PROPUESTAS SINDICALES
En este contexto, los sindicatos proponen una reforma centrada en cinco ejes, que pasan por mejorar la gobernanza y la transparencia del sistema de formación para el empleo, para lo que ve necesario fortalecer la participación de los interlocutores sociales, definir con claridad el papel de los distintos agentes que intervienen en el sistema y reforzar los espacios de consenso.
Asimismo, aboga por desarrollar la vinculación entre la formación para el empleo y la negociación colectiva sectorial estatal a través de las estructuras paritarias, que en su opinión deben conectar las demandas del mercado de trabajo con la oferta de cursos y articular la formación de las pymes y micro pymes.
También ve necesario aumentar la intervención de los representantes de los trabajadores en la formación en la empresa e impulsar una oferta de formación para el empleo en la red de centros públicos que supere las limitaciones de los centros privados que, por cuestiones de rentabilidad económica, ofrecen prioritariamente «formación generalista poco especializada».
Por último, marca la necesidad de disponer de una financiación «estable y suficiente», por lo que propone reanualizar todos los fondos aportados por empresas y trabajadores en concepto de cuota de Formación Profesional y alcanzar un acuerdo sobre las iniciativas a financiar con los mismos.
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