Con la llegada del nuevo año, los propósitos y las promesas por cumplir se amontonan y son de lo más variadas. El inglés ocupa uno de los primeros puestos en este caso y no sólo en cuanto a curso en sí de idiomas sino en la contratación de viajes para estudiar en el extranjero durante un año a partir de Septiembre o de cara al verano intensivo.
Según los centros de formación Enseñalia, en Enero es cuando los adultos quieren retomar el aprendizaje de inglés. Pero va más allá además de los cursos que inician este mes de inglés. Los adultos ven en Enero y Febrero los meses para la contratación de un plan anual en el extranjero o un intensivo en verano fuera de España para los más pequeños de la casa. Concretamente, según una encuesta realizada por la misma empresa, tres de cada cinco personas se fija como propósito de año nuevo aprender inglés.
Más allá de que escojan hacer dieta, dejar de fumar o practicar más deporte, el aprendizaje del inglés es una de las asignaturas pendientes para muchos españoles.
Y es que la mayoría de los adultos entre 20 y 40 años tiene en mente el objetivo del inglés para el nuevo año que comienza, por muchos y diferentes motivos. Las motivaciones son distintas según la edad puesto que en algunos casos lo hacen para incluirlo en sus currículums y, en otros casos, retomar la enseñanza del idioma.
Tal y como informa Enseñalia el perfil de los adultos más jóvenes, entre los 20 y los 30, obedece a gente que termina sus estudios y quiere completar su formación con el aprendizaje del inglés. Y qué mejor que la efervescencia del comienzo del año para fijarse este objetivo.
Otro perfil es el de aquellos adultos que desean retomar el idioma después de un largo período de tiempo, como una de esas experiencias que les motive y llene de satisfacción personal además de su utilidad en según qué entorno se mueva.
Y, finalmente, está el perfil del trabajador que decide complementar su formación en el puesto de trabajo con el aprendizaje del inglés. Esto es algo que cada vez más empresas apoyan y lo incorporan como hábito en los comienzos de año, coincidiendo con los propósitos de muchos de sus trabajadores y en beneficio propio para la formación de mejores profesionales.
De todas las personas que se proponen aprender un idioma, concretamente el inglés, el 55% de ellas ponen los medios suficientes para emprender este ‘pequeño reto personal’. No obstante el grado de satisfacción una vez que se consigue este propósito lleva, en muchos de estos casos de éxito, a la promesa de aprender un idioma diferente el año siguiente.
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