eBreeze, la empresa italiana especializada en el diseño, fabricación y distribución de cigarrillos electrónicos, confirma su liderazgo en Italia, donde se posiciona con una red de 108 puntos de venta.
La firma, que comenzó su actividad en el mercado italiano en el año 2007, ha logrado consolidarse entre las primeras cadenas de su sector, gracias a un modelo de negocio que ha alcanzado un alto índice de rentabilidad en cada una de sus unidades operativas.
Otros de los factores que han influido directamente en el éxito de la compañía en Italia es su esfuerzo por configurar una de las ofertas más extensas de cigarrillos electrónicos. Para ello, la marca ejerce el control de toda la cadena de producción, asegurando que sus productos responden a todos los protocolos de calidad y seguridad.
Desde sus inicios eBreeze ha apostado por un modelo de negocio en el que confluyen un producto de gran calidad, con una cualificada atención al cliente. Esta combinación le permite ofrecer un servicio totalmente personalizado, capaz de responder a las necesidades individuales de cada consumidor.
Además de contar con una de las gamas de productos más completas del mercado, los cigarrillos electrónicos de la firma, se caracterizan por estar fabricados con los mejores materiales, en base a un innovador diseño, sin renunciar a un precio muy competitivo que los hace accesibles al gran público.
A nivel internacional, eBreeze está presente en Francia, Bulgaria, Australia y España, con un total de 120 establecimientos.
En España la empresa, que ha comenzado recientemente su expansión, está presente con nueve tiendas, cifra que pretende incrementar antes de que finalice el ejercicio, bajo el plan de expansión establecido en nuestro país a través del sistema de franquicias.
Dentro de su estrategia de crecimiento, la enseña acaba de poner en funcionamiento un nuevo modelo de negocio, eBreeze Basic, un formato diseñado para rentabilizar al máximo la inversión que se puede instalar a partir de 5.000 euros.
El nivel de inversión de la tienda, se sitúa ahora en tan sólo 12.500 euros para locales con un mínimo de 20 metros cuadrados ubicados en poblaciones con más de 25.000 habitantes.
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