Las empresas familiares invierten un 66% más en innovación que las no familiares en España y son más eficientes en esa gestión de la innovación, según un informe de EY e IE University. Estas son son algunas de las conclusiones de la primera edición del informe “Las empresas familiares ante el reto de la innovación”, elaborado por IE Center for Families in Business de IE University para EY Empresa Familiar. El estudio se ha elaborado a partir de información extraída de 2.045 empresas del sector industrial que participan en la Encuesta de Estrategias Empresariales de la SEPI, así como de la información obtenida en 16 entrevistas con propietarios y gestores de empresas familiares españolas líderes en innovación. El trabajo analiza de forma comparada las decisiones de inversión, así como el proceso de gestión de la innovación, entre empresas familiares y las que no lo son.
El informe pone de manifiesto el menor tamaño generalizado de las EF en relación con el de las ENF. Casi la mitad de las EF tienen entre 10 y 49 empleados, mientras que solo el 23% de las ENF pertenecen a esta franja. Además, las EF tienen una mayor concentración en sectores como el textil, el de la confección o el de los productos alimenticios, al tiempo que cuentan con menor presencia en el sector químico o el de productos farmacéuticos. Teniendo en cuenta estas diferencias, el informe muestra que el “factor familia” es clave en la decisión de innovar: las empresas familiares invierten más en innovación para todos los grupos de tamaño sin excepción. Así, el gasto en innovación en las EF es un 66% superior que en las ENF lo que a lo largo del tiempo se traduce en un stock de I+D acumulado superior en un 56%. Adicionalmente, gracias a estas inversiones en innovación, este tipo de compañías obtienen un 22% de patentes y un 14% más de innovaciones de producto.
Otro dato que aporta el estudio es que las EF gestionan la innovación de forma más eficiente (calculado como el número de patentes e innovaciones de producto por millón de euros invertido en innovación). Como prueba adicional, el informe muestra como la eficiencia en la gestión de la innovación cae drásticamente cuando la empresa deja de estar controlada por un grupo familiar. En media, la ratio de eficiencia baja en 19 patentes por millón de euros invertidos en I+D. Por contra, cuando la empresa pasa a ser parte de un grupo familiar, se estima un aumento de ocho patentes por millón de euros invertidos en gastos de I+D.
Uno de los rasgos que distingue el tejido empresarial español frente al de otros países es que el 89% de las compañías son familiares. Un entorno en el que, según se deduce del informe, “el factor familia” actúa como impulsor de la innovación, ya que, a igualdad de condiciones, tamaño y estímulos, la empresa familiar innova más y mejor que la no familiar. El análisis también demuestra que las Empresas Familiares (EF) no sólo invierten más en innovación que las Empresas No Familiares (ENF), sino que también son más eficientes en la gestión del proceso innovador.
Los datos de Eurostat muestran que el gasto de innovación en España en relación a su PIB es un 41% inferior a la media europea. Según afirma Juan Santaló, profesor de IE University y coautor del informe: “El déficit de innovación en España viene en gran parte causado por el menor tamaño medio de la empresa española en un mundo donde las empresas grandes son las que más invierten en I+D. En este contexto, la capacidad de la empresa familiar española de innovar más y mejor en relación con otras empresas no familiares de igual tamaño representa una gran oportunidad para tratar de aliviar el déficit de innovación que existe en nuestro país”.
“Creemos que, en un mundo en el que los negocios cambian de forma permanente, las empresas con una larga historia tienen éxito no por su aversión al cambio sino, al contrario, porque saben adaptarse y aprovechar las nuevas tendencias y paradigmas producidos por la tecnología y el entorno económico y social. Es decir, saben innovar y responder a las demandas de un mercado y de unos clientes cada día más exigentes”, explica David Ruiz-Roso, socio responsable de EY Empresa Familiar.
En cuanto al efecto sobre la productividad, al aumentar dicho stock de I+D, se eleva la productividad empresarial media y este incremento es más pronunciado en las EF.
Del estudio presentado por EY Empresa Familiar se desprende que el rasgo principal que distingue al propietario familiar es la presencia de una serie de objetivos a alcanzar más allá de los puramente financieros. Entre ellos, destaca el deseo de mantener el control de la empresa familiar y de trasmitir el legado familiar a generaciones futuras. Alcanzar estos objetivos proporciona al accionista una riqueza socioemocional que quiere preservar por lo que la innovación se convierte en una estrategia de supervivencia no solo de la empresa sino del legado familiar. “La presencia de estos rasgos socioemocionales no solo impulsa la inversión en innovación, sino que también mejora la gestión de la innovación”, destaca David Ruiz-Roso.
Según Cristina Cruz, profesora de IE University y coautora del informe: “la presencia de esta dualidad de objetivos financieros y socioemocionales implica que el gran reto de las familias empresarias consiste en aprender a innovar desde la tradición, es decir, a conservar valores y tradiciones a la vez que transformar los modelos de negocio de la empresa para competir con éxito”. Es por ello, que los autores del informe destacan el papel relevante de las nuevas generaciones como artífices del cambio, pero también como garantes del legado familiar.
El informe identifica algunas mejores prácticas, entre las que cabe reseñar:
- Las EF tienden hacia un modelo transversal de gestión de la innovación que afecta a todas las áreas de la compañía.
- Las EF apuestan por la innovación colaborativa en mayor medida que las ENF. El porcentaje de EF que colabora con clientes, proveedores, competidores y universidades en materia de innovación es mayor que el de ENF.
- Las EF formalizan más el proceso de innovación que las no familiares, pero con matices. El análisis comparado por tamaño de las actividades de formalización muestra que un mayor porcentaje de EF en cada grupo cuenta con comités de innovación, así como con indicadores y planes de innovación. Sin embargo, las entrevistas realizadas muestran que los procesos de toma de decisiones de estos órganos son muy flexibles para no restar agilidad a la toma de decisiones.
- Las empresas familiares exploran más en materia de innovación que las empresas no familiares comparables por tamaño e industria. Aunque ponen mucho énfasis en su negocio tradicional y potencian las innovaciones incrementales, las EF también son muy activas en la búsqueda de oportunidades “fuera de la caja”.
Estimular la innovación en las EF, en la práctica
El documento de EY Empresa Familiar e IE Center for Families in Business extrae, asimismo, un decálogo de recomendaciones clave para liderar la gestión de la innovación en este tipo de empresas. Destacan entre ellas, ser agente del cambio apasionándose por la innovación; diseñar su estrategia con un enfoque transversal; aprender a delegar su ejecución; impulsar el intraemprendimiento o consolidar el papel de las nuevas generaciones para la innovación siga siendo una palanca de crecimiento por generaciones.
El papel relevante del factor familia como palanca de la innovación apunta a la importancia de prestar un apoyo claro mediante ayudas e incentivos económicos y fiscales a la innovación de la Empresa Familiar que permita su crecimiento en tamaño, su internacionalización y, por tanto, su sostenibilidad en el medio plazo, lo que fortalecerá aún más su papel como elemento clave de vertebración del territorio español.
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