ING lleva más de un año estudiando los beneficios del trabajo flexible y probando diferentes pilotos en varios equipos que le han ayudado a definir cuál es el modelo que mejor se adapta a las necesidades de todos sus profesionales. Tras recibir el feedback de los profesionales que los testaron y analizar las ventajas e inconvenientes de cada uno de ellos, el banco decidió elegir el modelo de teletrabajo 100% libre. De este modo, a partir del 1 de septiembre, sus 1.400 profesionales en España podrán organizarse con total libertad, desde casa o en la oficina, conciliando su vida personal con sus objetivos profesionales.
La entidad es la primera gran empresa y el primer banco que implanta este modelo en España. Estos son algunos de los principales motivos por los que ha decidido ir un paso más allá en esta materia:
- Aumenta la productividad de los profesionales. Según datos que maneja el INE, la productividad de los trabajadores que pueden elegir trabajar desde casa aumenta entre un 5 y un 25% frente a los modelos presenciales rígidos. ING lo pudo comprobar con datos objetivos durante sus programas piloto, viendo cómo en equipos con ratios de productividad medibles el rendimiento fue el mismo o superior.
- Aumenta la satisfacción de los profesionales. Según datos de Statista, el 71% de los españoles que han probado este modelo durante el confinamiento está contento con el teletrabajo. En fase piloto, los profesionales de ING puntuaron el grado de satisfacción del modelo de teletrabajo 100% libre con 8,73 puntos sobre 10.
- Atrae y retiene el talento. El salario ya no es el único factor relevante para buscar trabajo o decidir quedarse en uno. Según un estudio de Korn Ferry, se tienen en cuenta otras variables, como los beneficios sociales, el desarrollo de carrera, la diversidad y los valores corporativos. Además, en la actualidad, casi cuatro de cada diez empleados en España pertenecen a la generación de los millenials, un grupo que, aunque heterogéneo, tiene la flexibilidad como unas prioridades a la hora de elegir trabajo, según Easyrecrue.
- Permite la conciliación laboral y personal. La flexibilidad para elegir desde dónde trabajar suma a la conciliación y a crear un equilibrio entre las dos esferas de la vida de los profesionales: la de su trabajo y la personal. De hecho, durante el programa piloto de ING es el factor mejor valorado entre los profesionales con 8,94 puntos sobre 10.
- Facilita la flexibilidad de horarios. Contar con flexibilidad de horarios ayuda a la organización personal en función de las necesidades de cada profesional.
- Puede contribuir a reducir la brecha de género. Según datos que maneja Eurostat, las mujeres cobran 15% menos que los hombres y acaban recibiendo menos pensiones. El INE confirma que casi 9 de cada 10 (el 87%) de los hombres que dejan de trabajar en algún periodo concreto para cuidar de sus hijos lo hacen durante seis meses o menos. En el caso de las mujeres es del 50%, ya que la otra mitad lo hace por un periodo superior.
- Menos desplazamientos. No tener que ir a la oficina todos los días de manera obligatoria rema a favor de la conciliación, pero también contribuye a un desarrollo más sostenible.
- Reducción de los atascos y del estrés. Según la App de transporte Moovit, en Madrid se pierde de media 62 minutos en ir a la oficina en transporte público y en Barcelona 50. Si se decide ir en coche al trabajo, los conductores madrileños pueden llegar a pasar alrededor de 42 horas anuales solo en atascos, 40 si viven en Cartagena o 28 en Barcelona, según el INRIX Global Traffic Scorecard. Estas situaciones, que en muchos casos se venían repitiendo dos veces al día de lunes a viernes, podrían disminuir considerablemente, lo que haría reducir también el estrés que provocan.
- Menos emisiones de gases contaminantes. Disminuyendo esos atascos y los desplazamientos a las oficinas, se reducirán las emisiones de gases contaminantes. Según Ecologistas en Acción, debido a la situación provocada por el COVID-19, la contaminación en las principales ciudades españolas cayó un 55% comparado con la media de la última década. Eso ha provocado que la calidad del aire mejorara radicalmente y puede hacer que la salud de los habitantes de estas ciudades y del planeta en su conjunto también mejore a medio y largo plazo.
- Planificación urbanística. Esta nueva realidad puede llevarnos también a un cambio de la propia planificación urbanística de las ciudades, donde primen las ciudades más verdes, limpias y donde los peatones sean los verdaderos protagonistas.
Todas estas piezas encajan en un escenario en el que también se prioricen medidas que garanticen la gestión eficiente del tiempo, la desconexión digital y la libertad de elegir entre trabajar físicamente o en remoto según las tareas y las necesidades de cada profesional. Además, es necesario contar con toda la tecnología necesaria para mantener modelos relacionales entre los empleados que les permitan trabajar en equipo y que se sientan parte de un todo en el día a día.
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