Las empresas más pequeñas son las que concentran y más recurren a los contratos formativos y de prácticas, según un informe elaborado por CCOO con los datos del SEPE. De hecho, en el periodo de 2014-2020, el 74% de los contratos de formación y aprendizaje y el 50% de aquellos en modalidad de prácticas tuvieron su origen en microempresas, es decir, empresas de máximo 25 empleados en plantilla. Al contrario ocurre en las grandes empresas que cuentan con más de 500 empleados en plantilla, en las que en ese mismo periodo solo se realizaron el 10% de los contratos de formación y el 11% de los contratos en prácticas registrados en las oficinas de empleo.
Dos modelos de contrato para el actual modelo de formación empresarial
Según este estudio, en los últimos 14 años, de todos los trabajadores que han accedido a la empresa con un contrato de formación y aprendizaje, tan solo han continuado con un contrato indefinido el 7%, descendiendo incluso a un 2% entre 2013-2014.
En el caso de la modalidad en prácticas destinado a personal cualificado, es decir, universitarios o estudiantes de Formación Profesional, de 2007 a 2020 se ha registrado como uno de cada cuatro jóvenes contratados con esta modalidad han continuado en la empresa con un contrato definido.
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