Más del 60% de los millennials afirma que renunciaría a una parte de su salario neto a cambio de recibir más beneficios por parte de la empresa y unas mejores condiciones laborales, según el estudio ‘Millennials inTech’ realizado por la start-up tecnológica ForceManager. De hecho, son especialmente bien valoradas las propuestas de trabajar desde casa, la flexibilidad horaria, una asistencia sanitaria privada o aplicar medidas de fomento de la salud laboral.
Además, según este mismo estudio, un tercio de los encuestados aprovecha su hora de la comida para hacer ejercicio físico. Los jóvenes están especialmente concienciados con el cuidado de su salud y las iniciativas más valoradas por éstos giran alrededor del bienestar personal como, por ejemplo, la organización de talleres de nutrición por parte de la empresa o la propuesta de actividades relacionadas con el bienestar, como yoga, mindfulness o quiromasaje.
Sillicon Valley, la pionera
Sillicon Valley encabezó a principios de los 2000 este giro del sector empresarial hacia una mayor preocupación por la felicidad de sus trabajadores. Google, por ejemplo, destaca por ofrecer a sus trabajadores servicios que a la mayoría le parecen impensables: Bowling, piscinas, comida preparada por chefs, peluquería, yoga, gimnasio y masajes.
“En España estas dinámicas son mucho más incipientes, pero se nota una tendencia a aplicar estos beneficios de forma más recurrente, sobre todo a partir de una nueva cultura empresarial”, defienden fuentes de Deusto Salud, centro de formación continua a distancia especializado en cursos relacionados con la salud y el bienestar. Entre ellos destaca el Curso Superior de Quiromasaje, Curso Superior de Mindfulness o el Curso de Monitor de Yoga.
Una nueva dimensión de los RRHH
Esta nueva cultura empresarial conlleva también una nueva organización de los departamentos de Recursos Humanos, más centrados en los aspectos emocionales de los trabajadores, así como contratación de personal externo para garantizar el bienestar y la salud de sus empleados: “Suelen ser empresas relacionadas con las IT, con largas jornadas delante del ordenador sin realizar actividad física, lo que a menudo deriva en molestias en las cervicales”, analizan fuentes de Deusto Salud.
Por ello, una buena herramienta es la subvención de sesiones de quiromasaje para la plantilla: “Es un beneficio doble. El trabajador mejora su salud y la empresa se evita futuras bajas laborales”.
Los comentarios están cerrados.