En un entorno laboral en constante cambio, las prioridades de los trabajadores han evolucionado de forma significativa. Así lo recoge el último Informe Workmonitor de Randstad, que analiza las tendencias y demandas laborales en 35 países, incluido España, mediante encuestas realizadas a más de 26.000 trabajadores.
El informe revela que el 53% estaría dispuesto a renunciar si su trabajo les impidiera disfrutar de su vida personal, mientras que el 39,2% haría lo mismo si sus peticiones de flexibilidad no fueran atendidas.
“En España, el talento ya no se conforma únicamente con estabilidad económica. Ahora busca entornos laborales que prioricen el equilibrio personal, la confianza y el desarrollo continuo. Las empresas que no se adapten a estas nuevas expectativas tendrán dificultades para atraer y retener talento”, asegura Oriol Mas, director general de Randstad Enterprise.
La tendencia global es priorizar la conciliación, también en España, aunque el salario sigue siendo clave
Por primera vez en la historia de Workmonitor, el equilibrio entre la vida laboral y personal se considera más importante que el salario (83% frente a 82%) a nivel global. Sin embargo, en España, la relación entre conciliación y estabilidad económica presenta particularidades que la diferencian del contexto global.
El estudio revela que el 39% de los trabajadores españoles estaría dispuesto a reducir sus ingresos si el empleo permitiera una mayor conciliación con su vida personal. Sin embargo, el 61% restante no aceptaría una reducción salarial, ni siguiera si el trabajo fuera plenamente compatible con su vida social. Además, el 58% de los encuestados en España asegura priorizar otros aspectos, como la estabilidad económica o el desarrollo profesional, por encima de la conciliación laboral-personal.
Las nuevas prioridades del talento: personalización y valores
El 41% de los encuestados españoles afirma haber renunciado a un empleo debido a un entorno laboral tóxico, un aumento relativo del 32% respecto al año anterior. Además, el 40% asegura que no aceptaría un trabajo si la empresa no compartiera sus valores sociales y medioambientales.
La flexibilidad es otro factor determinante a nivel global, ya que un 31% de los empleados encuestados dejó su trabajo por la falta de opciones flexibles, y esta tendencia es especialmente notable entre las generaciones más jóvenes, como la Generación Z.
Sin embargo, persiste la desconfianza en torno al trabajo remoto, de hecho, un 28% de los encuestados no cree que sus jefes confíen en su productividad cuando trabajan desde casa.
El informe destaca la importancia del sentido de comunidad en el entorno laboral para los trabajadores españoles. El 87% asegura que rinde mejor cuando siente una conexión genuina con sus compañeros, mientras que el 86% lo considera esencial para su salud mental y bienestar en el trabajo.
“Los datos demuestran que los empleados buscan entornos laborales que fomenten la colaboración, la inclusión y el apoyo mutuo, factores clave para potenciar la productividad”, afirma Oriol Mas, director general de Randstad Enterprise.
La formación y el desarrollo profesional, una prioridad innegociable
La capacitación es otro punto crítico para el talento en España. Según el informe, un 45% de los trabajadores del país estaría dispuesto a renunciar si no se les ofrecen oportunidades de desarrollo profesional que les preparen para el futuro. Esta cifra ha aumentado significativamente en comparación con el año pasado, cuando se situaba en el 33%.
Las áreas de formación más demandadas a nivel global incluyen la inteligencia artificial (23%), la alfabetización tecnológica y de IT (11%) y las habilidades de liderazgo y gestión (7%). A pesar de esta demanda, un 36% de los encuestados afirma que no recibe formación adecuada por parte de sus empleadores, lo que evidencia una brecha significativa entre las expectativas del talento y la oferta empresarial actual.
La confianza en el manager
El informe también destaca el papel clave de los directivos o managers en la satisfacción y retención del talento. Según los datos, el 76% de los empleados confía en que sus líderes les permiten trabajar de manera independiente, y el 68% percibe confianza para mantener la productividad trabajando desde casa.
El desarrollo profesional también es un factor decisivo, ya que el 61% de los trabajadores percibe que su gerente se preocupa por su crecimiento, aunque un 40,6% consideraría dejar su empleo si no siente el respaldo necesario para progresar. A pesar de ello, el 53% asegura tener una relación sólida con su superior.