Las empresas ya no se entienden solo como organizaciones cuyo objetivo es hacer negocios y ganar dinero. Los tiempos están cambiando, y ahora se les exige un compromiso real por el que, mientras realizan su actividad, también consigan hacer un mundo mejor, más justo, que tengan una mayor preocupación por causas sociales, que cuiden del medio ambiente, etc. Además, se les pide que abran los ojos y que miren a lo que les rodea, que pongan su grano de arena, que den ejemplo y, sobre todo, que no estén al margen de las preocupaciones de los ciudadanos. Esta es una manera en la que el conjunto de la sociedad gana, pero que también reporta muchos beneficios si se habla de economía.
Una de las exigencias, que en la actualidad más preocupa y por la que más se lucha, es la igualdad de derechos. En Medallia, líder mundial en gestión de experiencias, según explica Paloma Breva, su directora de marketing para el Sur de Europa, esta exigencia en la empresa, está estrechamente relacionada con la Experiencia de Empleado. Así, comenta que las compañías que pongan el foco de su gestión en el establecimiento de programas para conseguir la igualdad de oportunidades, serán empresas en las que los empleados se sientan más implicados y más satisfechos con su labor.
«En Medallia siempre hemos entendido la diversidad, en todas sus vertientes, como uno de los pilares básicos de nuestra filosofía. Por ello nuestro equipo está formado por profesionales de diferentes razas, religiones, orientación sexual, etc., y hemos adquirido el compromiso de garantizar un lugar de trabajo inclusivo y acogedor para todos» explica Paloma Breva. Pero como dice nuestro CEO Leslie Stretch, «enfrentar la desigualdad requiere más que palabras, se necesita acción, y por ello estamos comprometidos a impulsar el cambio, creando entornos más equitativos donde las personas de todos los orígenes puedan prosperar».
Medallia cuenta con nueve ERG (Employee Resource Group), que son comunidades dirigidas por los propios empleados y que están abiertas a todos los que forman parte de esta compañía. Además, están facultadas para impulsar iniciativas que garanticen que se escuchen todas las voces. Y en concreto dos de ellas se han creado para fomentar la igualdad entre hombres y mujeres. Se trata de “Women at Medallia”, para empoderar y formar a las empleadas, con un enfoque en la igualdad de género, y de “Women in Tech”, cuyo objetivo es apoyar y conectar a las mujeres con la tecnología, e involucrarse con una comunidad más amplia de mujeres con formación técnica.
Las empresas que consigan adaptarse a los nuevos tiempos y sobrevivir a largo plazo, serán aquellas que tengan muy en cuenta las siguientes razones:
- La diversidad enriquece. Las empresas se han dado cuenta que apostar por la diversidad genera grandes beneficios. Construir equipos en los que hay diversidad de género, edades, razas…, tiene como consecuencia la amplitud de miras, un enfoque con más puntos de vista y un abanico más extenso de opiniones divergentes, que conviene tener en cuenta a la hora de enfocar proyectos o encontrar soluciones.
- Las medidas de conciliación no sólo benefician a las mujeres. Es un error pensar que los horarios flexibles, las reducciones o el respeto de la duración de la jornada, entre otros, son grandes pasos que se han dado solamente en favor de las mujeres, para que estas pudieran conciliar su vida laboral y familiar, ya que todos los empleados disfrutan de esta situación, independientemente de su género. Apostar por una manera de trabajar más eficiente, donde se aproveche mejor el tiempo, está estrechamente relacionado con el incremento de la felicidad de las personas y una óptima Experiencia de Empleado.
- Mejora la buena imagen de las empresas. La igualdad es un compromiso real, cuando este es así no hay mejor escaparate al exterior para las compañías. Trabajar en una empresa con buena imagen genera orgullo de pertenencia al grupo, y mejora en gran medida la Experiencia de Empleado. Y cuando ésta es tan positiva, también lo es la Experiencia de Cliente, lo que al final se traduce en grandes beneficios económicos. Al contrario, cuando el compromiso no es real, se trata solamente de “maquillaje” de cara al exterior, la imagen de la empresa puede verse muy comprometida.
- Atrae el talento. De la misma manera, una empresa bien considerada impulsa su crecimiento y consigue atraer y fidelizar a sus clientes, atrae el talento. Si bien el sueldo era una de las principales razones por las que las personas querían trabajar en una empresa u otra; en la actualidad, hay otros motivos que se tienen muy en cuenta, a la hora de elegir las empresas de las que se quiere formar parte. Estas son las medidas de conciliación, las políticas de igualdad o la apuesta por el desarrollo de una identidad comprometida con valores sociales.
- Retribuciones justas e iguales genera menos fricciones entre los empleados. Si se quiere apostar por un buen clima laboral, no puede haber dos personas en el mismo puesto, con la misma experiencia, haciendo el mismo trabajo…, y cobrando diferente. La desigualdad en el trato, en los sueldos, en los beneficios o ventajas que tenga la empresa, genera grandes problemas entre los miembros de los equipo y especialmente hacia los directivos. Y lo que es peor, provoca un sentimiento de injusticia muy desmotivante, con el que es imposible tener empleados comprometidos.
- La igualdad está estrechamente relacionada con la felicidad de los empleados. Si tienes a un sector que se siente mal tratado o peor tratado que otro, es imposible apostar por entornos de trabajo en los que prime la felicidad. Y está demostrado que al igual que en la vida privada uno debe ser lo más feliz posible, también debe tratar de conseguirse en el entorno laboral. Empleados felices y que se sienten bien tratados, aportan más a las empresas y rinden más, además de tender a hacerlo de forma más continuada en el tiempo. Los empleados son el vínculo que une empresas y clientes, por ello es vital cuidarles.
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