El pasado domingo 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer, una fecha que invita a reflexionar sobre la participación de la mujer en la sociedad. En este contexto, analizar el presente y el futuro de la posición de la mujer en el entorno laboral es un paso de vital importancia para romper la brecha de género.
El origen de esta fecha data de 1857, cuando las trabajadoras neoyorquinas de la industria textil organizaron una huelga para luchar contra las desigualdades. A día de hoy, aún con las evidentes mejoras, el Fondo Económico Mundial estima que hacen falta 99 años para lograr la paridad entre hombres y mujeres en el trabajo. Si bien esta estimación muestra unos datos negativos, que lo son, reduce los 108 años tasados en 2018.
Each for equal, la lucha por la igualdad de oportunidades
El lema de RSM en el Día Internacional de la Mujer es ‘Each for equal’, y defiende la igualdad en el trabajo como protagonista de esta celebración, pidiendo más equilibrio en todos los aspectos del ámbito profesional.
Los datos indican que algunas de las organizaciones más exitosas e innovadoras del mundo son aquellas que han logrado la igualdad de género a nivel directivo. Según un informe de Catalyst las empresas con un mayor porcentaje de mujeres en puestos ejecutivos aumentan su rendimiento un 34%. Jean Stephens, consejera delegada de RSM Internacional, afirma que “el hecho de disponer de equipos multidisciplinares formado por personas con diferentes puntos de vista permite tener una visión mucho más completa a la hora de tomar decisiones”.
Según Harvard Business Review, el 43% de las mujeres con estudios superiores y con hijos abandonan su carrera o se piden una excedencia, siendo en ocasiones muy complicado la reinserción posterior. Es responsabilidad de las empresas promover opciones como la baja de paternidad compartida, los horarios flexibles o apostar por el teletrabajo.
Algunas instituciones públicas han presentado ya las conocidas ‘Cuotas de representación’, un tema controvertido que insta a las compañías a tener un porcentaje mínimo de mujeres. En España, por ejemplo, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha fijado en un 30% para el cierre de este año. Ante esto, Jean Stephens declara que estas cuotas pueden “asegurar resultados reales” y que “una vez instaurada la igualdad plena en los órganos de decisión, entonces estas cuotas ya no serán necesarias”.
Muchas empresas aprovechan el 8 de marzo para mostrar su apoyo y su compromiso para paliar cualquier brecha entre hombres y mujeres. RSM implica a todos sus empleados en la lucha por la igualdad confiando en el papel de sus trabajadores a la hora de crear cultura, estructuras y procesos que apoyen de manera sostenible a las mujeres en el lugar de trabajo.
Javier Mourelo, director de personas de RSM Spain, comenta: “En RSM creemos en la diversidad y estamos comprometidos con facilitar todos los medios necesarios para ser una firma realmente meritocrática, en la que los mejores profesionales – con independencia de su sexo u origen – alcancen las posiciones de responsabilidad adecuadas a su talento, compromiso y capacidad. Actualmente contamos con un 42% de mujeres, dato que va a ir, sin duda, en aumento en los próximos años”.
Los comentarios están cerrados.