Fórmulas que se adaptan a las personas, modelos de trabajo acordes con las necesidades de los puestos y, en general, una visión más flexible del entorno profesional, son algunas de las bases sobre las que Datisa fundamenta la gestión de sus recursos humanos.
En términos generales, las pymes siguen sin tener una mentalidad tecnológica y, siguen siendo bastante rígidas a la hora de aplicar las TIC para facilitar aspectos como el teletrabajo, algo que entra en contradicción claramente con la evolución que experimenta la sociedad en general y las empresas en particular.
La movilidad o el cloud son elementos que prácticamente todas las organizaciones tecnológicas tienen en cuenta en la prestación de sus servicios, en el desarrollo de sus aplicaciones y en sus estrategias comerciales. Sin embargo, no son muchas las pequeñas y medianas empresas –incluso las tecnológicas- que aprovechen las ventajas que aportan ambas, para impulsar políticas de gestión del trabajo más flexibles o estrategias orientadas a la conciliación.
Marta Romero, responsable de recursos humanos de Datisa dice que “no hablamos de las startup o de las empresas de reciente creación, para las que la tecnología es un elemento propio de su ADN, sino de aquellas pymes que llevan años en el mercado para las que cambiar de mentalidad resulta más complicado. Sin embargo, la nube o la movilidad, son dos herramientas que ya se están imponiendo y que acabarán por impulsar nuevos modelos de trabajo, también en las pymes más convencionales”.
Datisa, como empresa tecnológica y focalizada en el entorno de las pequeñas y medianas empresas, utiliza la tecnología también para favorecer la flexibilidad y la conciliación entre sus trabajadores. Con ello, se han conseguido elevar los niveles de motivación y compromiso de sus empleados, aumentando los ratios de productividad de los mismos, según los últimos datos obtenidos de la encuesta de satisfacción, que periódicamente realiza la compañía.
Teletrabajar muchas veces implica dedicar más horas de las habituales a la empresa, pero introduce el componente de la flexibilidad que permite adaptar las tareas a los horarios, las disponibilidades e, incluso, a los estados de ánimo. Marta Romero, dice además que, en la mayoría de los casos, se ha demostrado que los empleados trabajan más horas en la distancia que desde sus propios puestos en la oficina, pero están más satisfechos porque pueden ajustar sus horarios y participar de aspectos de su vida personal que antes tenían que delegar.
Es evidente, que no todos los puestos y responsabilidades son susceptibles de practicar el trabajo en la distancia. “Los servicios de atención a clientes o los de soporte no pueden beneficiarse de estas fórmulas, sin embargo, en Datisa, buscamos el equilibrio y la compensación con otras ventajas que permitan mejorar no sólo el servicio, sino la motivación de quienes lo prestan”
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