La Fundación Adecco, con el apoyo del Ministerio de Empleo y Seguridad Social y el compromiso de 40 empresas, no ha querido desaprovechar para lanzar un mensaje de concienciación social sobre la doble discriminación que siguen experimentando algunas mujeres en su acceso al mercado laboral.
Nos referimos a mujeres que, por sus circunstancias personales, corren el riesgo de ser descartadas en procesos de selección, debido a falsos prejuicios y estereotipos, por ejemplo: discapacidad, mayores de 50 años, con responsabilidades familiares no compartidas o víctimas de violencia de género.
‘No le pongas género, ponle talento’
Un total de 40 empresas comprometidas con la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres han hecho posible esta campaña de sensibilización.
El elemento central de la campaña es un vídeo que simula un proceso de selección en el que se reflejan algunos de los miedos, reticencias y prejuicios más habituales en los procesos de selección en los que participan mujeres con discapacidad, mayores de 50 años o con responsabilidades familiares no compartidas.
Según Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco: “estos prejuicios suponen una gran barrera para miles de mujeres en nuestro país. Por un lado, por su condición de mujer, las demandantes de empleo se enfrentan a prejuicios relacionados con el miedo a la conciliación o las bajas por maternidad. Si además de mujer cuentan con un factor considerado de discriminación como la edad, la situación familiar o el hecho de tener una discapacidad, se generan etiquetas que pesan mucho a la hora de encontrar un empleo. A través la campaña “No le pongas género, ponle talento”, desde Adecco y su Fundación, queremos luchar contra estas etiquetas, con el objetivo de sensibilizar y frenar las situaciones de discriminación”.
Por último, Mesonero recuerda los temores y prejuicios más habituales que siguen obstaculizando la inserción laboral de las mujeres que atraviesan estas situaciones: “sigue asociándose a la mujer con discapacidad o con limitaciones, sin ver sus potencialidades; a las mayores de 50 años con escasa flexibilidad y capacidad de adaptación, sin poner el foco en su experiencia. Y por último, las mujeres que tienen responsabilidades familiares se enfrentan al miedo a la conciliación, cuestión limitante para las empresas y que provoca que nuestro país pierda talento y competitividad”.
Los comentarios están cerrados.