Suben los precios y disminuye el poder adquisitivo, es la situación a la que se enfrentan muchos españoles. En octubre, el IPC registró un aumento interanual del 7,3%, habiendo alcanzado un pico de casi 11 puntos en el mes de julio, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta inflación está generando un impacto directo en los costes empresariales que, según CEPYME, se ubican por encima del 24%. En paralelo a buscar fórmulas para gestionar los aumentos en sus partidas de gasto, los negocios investigan cómo podrían responder a las nuevas necesidades de sus plantillas que, en la mayoría casos, están viendo mermada su capacidad de ahorro y compra.
En este sentido, Cobee, primera plataforma digital europea de gestión de planes de beneficios de empleados de manera flexible y totalmente automatizada, señala el potencial de la retribución flexible como solución para que las empresas favorezcan el bienestar económico de sus trabajadores.
Modelos de compensación alternativos para evitar la espiral precios-salarios
Según datos del Banco de España, el 65% de los trabajadores españoles no está protegido por convenio ni tiene revisiones de sueldo en función del IPC. Además, diferentes expertos alertan sobre la importancia de evitar caer en la espiral salarios-precios; una situación en la que la subida de ambas variables se retroalimenta y, en consecuencia, se pronuncia la tendencia inflacionista. Todo ello ha llevado a una realidad en la que, mientras que el IPC ha superado el 10%, los salarios brutos apenas han crecido un 4,3%, según datos del INE para el segundo trimestre de 2022.
Como solución a esta diferencia, las empresas pueden implementar planes de retribución flexible y beneficios sociales, que consiguen aumentar la capacidad adquisitiva de los profesionales sin modificar directamente su base salarial. Con este modelo de compensación, los empleados pueden contratar diferentes productos y servicios directamente desde su sueldo, y, consecuentemente, lograr un ahorro. De media, un trabajador con un salario anual de 30.000 euros puede ahorrar 2.500 gracias a la retribución flexible.
«La situación actual está suponiendo un total desafío para las empresas, quienes deben hacer frente a las consecuencias de la inflación sobre sus negocios y, a la vez, a las demandas de sus plantillas», explica Borja Aranguren, cofundador y CEO de Cobee. «Desde Cobee llevamos años impulsando la retribución flexible como fórmula para cumplir con las necesidades actuales de los profesionales. Este modelo compensatorio no solo consigue aumentar su poder adquisitivo, sino que también favorece el acceso a diferentes productos, como seguros, planes de pensiones y opciones de formación«, concluye.
Los beneficios que pueden disfrutarse como retribución flexible están exentos de IRPF, permitiendo a los trabajadores ahorrar hasta un 30% de su salario bruto en impuestos. Dentro de estos planes las empresas pueden incluir desde productos relacionados con el ámbito de la salud (como seguros médicos, bonos gimnasio o atención psicológica) hasta productos financieros (como planes de pensiones o seguros de jubilación). También pueden ayudar a sus plantillas con el pago de gastos diarios, siendo el caso de los bonos transporte y los tickets restaurante; y de productos para la conciliación, como los cheques guardería.