En un entorno como el actual en el que los ERTE forman ya parte de nuestra vida, en el que empleados y empresas se adaptan cada día a un mundo incierto, a una economía cambiante y a una nueva forma de relación entre la empresa y el empleado. Es necesario encontrar la forma de armonizar intereses de empresas y empleados y de implementar políticas de retribución sostenibles para la empresa, que cuiden la cuenta de PyG. Para muchas empresas no es el momento de incrementos salariales pero sigue siendo muy necesario retener el talento y mantener el engagement del empleado. Es entonces el momento de incorporar planes de beneficios que sean percibidos por el empleado como auténticas retribuciones y aportaciones sustanciosas a su economía.
Así que la pregunta sería: ¿Qué tipo de beneficio es un respaldo real a la economía del empleado y no sale de su retribución o salario?
Un gasto de los más importantes por estar presente siempre y a lo largo de muchos años es la compra de una casa. En concreto, la financiación que firma el empleado para la compra de su vivienda, ya sea esta su primera vivienda (entre los 28 y los 40 años) o un cambio de casa (a partir de los 40 y en adelante) sin olvidar la compra de una segunda residencia. Para cualquiera de estas opciones es vital que la hipoteca que firma el empleado no defina negativamente su situación económica actual y la que tendrá durante muchos años.
De la buena gestión de la financiación que va a firmar dependerá:
- La cuota que pagará todos los meses de lo que dependerá la mayor o menor capacidad para llegar a fin de mes del empleado y por tanto, la necesidad que tendrá de recurrir a soluciones de emergencia con el consiguiente estrés asociado
- Qué capacidad de ahorro tendrá durante años para afrontar imprevistos y para sentirse tranquilo o todo lo contrario…
- Qué comisiones estará obligado a pagar si decide cambiarse de banco para firmar algo mejor…
- Los seguros que haya firmado por imposición del banco y que o no necesita o son muy mejorables o incluso ya los tiene incluidos como retribución por su propia empresa y un largo e importante etcétera…
Negociar lo que le ofrecen al empleado para su hipoteca determina un abanico tan importante de implicaciones económicas que se puede considerar vital para su salud financiera durante muchos años.
Ofrecer este beneficio desde la empresa (y a coste cero para ella) es un paso importante hacia el tipo de retribución sostenible para la empresa y realmente cuantifícable para el empleado, hacia la captación y retención del talento, hacia un bienestar que se percibe en el momento de contar con este beneficio y durante muchos años.
Asesoramiento financiero sin coste para las empresas
Accuracy se ha incorporado al programa de beneficios de Carrefour, de Aena, de Novartis o KPMG entre otras proporcionando asesoramiento financiero sin coste para el empleado y sin coste para la empresa. Cuando un empleado decide comprar una vivienda y necesita una hipoteca nosotros le proporcionamos todas las ofertas negociadas para que firme lo mejor que puede firmar dada su situación.
Partimos de la base de que lo primero que el empleado se encuentra cuando quiere una hipoteca es una oferta muy mejorable, sin conocimientos, sin tiempo y sin la información necesaria termina firmando algo que se puede mejorar mucho y que es determinante para su economía. Hablamos de mejoras que suponen miles de euros de ahorro en intereses, cuotas mucho más bajas, una aportación de ahorro familiar a la compra mucho más reducida entre otras ventajas.
En resumen, el empleado tendrá una visión mucho más amplia y clara de la situación bancaria actual y de lo que realmente puede firmar. Por otra parte es un alivio en muchos sentidos para el empleado, contar con esta información, tener esta certeza, pagar lo menos que puedes pagar en un gasto tan importante y sentirse respaldado de esta forma ante un trámite realmente complicado para cualquiera de nosotros como es firmar una hipoteca en buenas condiciones.
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