El coaching está pegando fuerte en torno al ámbito empresarial, pero también se incrementa su contratación a nivel personal, sobre todo como un medio eficaz para solventar los problemas particulares.
Según datos del centro de coaching Toque de Luz, el 40% de las personas que acuden a estos profesionales lo hacen por temas relacionados con el desarrollo profesional, seguido de aspectos referentes a la autoestima y la confianza para enfrentarse a nuevos retos, el 32%.
Cada día aumenta la demanda de este tipo de servicios y crecen las personas que buscan alcanzar objetivos personales o profesionales más altos. “Se está creando una corriente proactiva de personas que solicitan este tipo de ayuda”, explica Andrea Linati, coach personal certificada de Toque de Luz.
Otros temas de gran relevancia son la gestión de las relaciones interpersonales, ya sean familiares, amorosas o de amistades (18%), así como la gestión del equilibrio entre vida profesional y personal (10%).
Otra inquietud que tiene un público más extenso recae sobre las sesiones orientadas a la gestión económica y cómo atraer más dinero, de hecho el 65% de los que contratan coaching personal trabajan ese tema en alguna o varias sesiones, así como un 30% lo han hecho en sesiones enfocadas a encontrar pareja.
Sesiones de coaching por Skype
Actualmente, no es necesario desplazarse para poder realizar sesiones, ya que las tecnologías ofrecen facilidades a los interesados en este tipo de disciplina mediante la conexión por Skype o por teléfono.
“El 42% de mis clientes residen en zonas geográficas diferentes y aprovechan esta modalidad, afirmando que se sienten muy a gusto trabajando desde dónde quieren, sin desplazamientos y con una tarifa más económica”, afirma la coach Andrea Linati.
De esta manera, un coach puede trabajar con clientes de todas partes de España y Latinoamérica, a lo que hay que añadir países del extranjero si se tiene conocimiento de sus respectivos idiomas.
3 comentarios en «Crece la demanda del coaching personal»
tiene gracia, pasamos de la moral y su disciplina al psicólogo, y ahora pasamos del psicólogo y medicinas antidepresión al coaching, que suena a cochino, pero con la ventaja que no tiene medicinas. Casi era mejor hacerse budista y aprender a ser feliz, a a no, que eso tiene disciplina. Nada al cohing y que descubran pronto las pastillas para olvidar.
Lisa, por el comentario que haces, intuyo que el concepto que tienes sobre el coaching no se acerca demasiado a la realidad.
El coaching es una herramienta usada a la hora de conseguir objetivos, ¿ser más feliz? en cuanto a vivir en el pais de la piruleta, no, pero en cuanto a que si consigues una meta propuesta, puedes mejorar algunos aspectos de tu vida y sentirte mejor, eso si, creo que es algo obvio. Nada que ver con la psicología clínica, de hecho los coaches no trabajan con patologías, para eso hay otros profesionales.
Lástima que haya tan mala información al respecto y tanto intrusismo de gente no formada adecuadamente.
No obstante, el coaching es para todos, pero no todos son para el coaching.
Visto el nivel de desempleo en España, y la necesidad de muchas personas de buscar empleo así como las que lo tienen de no perderlo, afloran un montón de vicios y carencias tanto de empleados como de sus responsables o directivos. En España hemos sido mucho de poner paños calientes, y las empresas, al igual que el resto de la sociedad son buena muestra de ello. Lo que a mí no deja de asombrarme, es que en todo este entorno, sigan al cargo de personas en multinacionales de renombre auténticos incapaces, gestionando y destrozando carreras. Espero que las compañías que buscan ser rentables, tengan la sensibilidad de facilitar toda la formación posible (y también el coaching, que no siempre es lo mismo) para que sus directivos sepan poner la compañia (o sus departamentos) en ruta al éxito. Así como cuidar y valorar a sus empleados valiosos. En España seguimos haciendo las casas empezando por el tejado y tenemos auténticos incapaces recibiendo coaching, cuando no hay de donde rascar. Siento mi comentario un poco pesimista, pero por un lado veo auténtica necesidad de estas cuestiones y por otro mucho coach o empresas de coaching vendiendo humo y trainings al peso sin ningún rigor, y con directivos deseando mirar el whatsapp y seguir con sus inercias. Por desgracia, sé de lo que hablo.
Los comentarios están cerrados.