Equipos de Alto Rendimiento, ¿cuestión de reglas?

Coaching de equipos es una disciplina del coaching ejecutivo altamente demandada por empresas que necesitan hacer lucir el talento de sus equipos en su conjunto y no solo el del individuo, conscientes de que «en equipo se llega más lejos» y de que actualmente «las cosas dependen mucho menos de una persona y mucho más de un equipo”, y de que “ya no se puede pensar solamente en personas aisladas”, explican los expertos de la EEC. 

La EEC, empresa pionera en el sector del coaching ejecutivo en España y en Latinoamérica, interviene en empresas para convertir a sus equipos de trabajo en equipos de alto rendimiento, por un lado, y por otro, entrena a incorporar las herramientas y la mirada necesaria para saber gestionar y acompañar al equipo en sus reuniones reales hasta los resultados deseados.  

La formación en coaching de equipo se dirige también a directivos y líderes de empresa «para que aprendan a sacar partido a los equipos en función de la etapa en la que se encuentren, para que sepan adaptar su rol de líderes a esas circunstancias, y también para que como líderes sepan delegar las funciones que no les acercan al objetivo», aseguran desde la EEC. 

Los líderes que se forman como coaches de equipos en la EEC, continúan los responsables académicos de la empresa, también «logran incorporar habilidades para aumentar el compromiso de las personas del equipo, para coordinar acciones de forma eficaz y para resolver conflictos».  

Explican en la EEC, que los conflictos tienen que ver en muchos casos con la ausencia de reglas o con unas reglas que ya no funcionan. «En nuestro programa de formación, el coach y el líder aprenden las reglas de oro de los equipos para saber mirar las que funcionan y las que no, pues no se trata de mirar la persona sino la regla», pues como aclaran en la EEC, “si un equipo no se pone de acuerdo es que es tarde. Las reglas son un trabajo previo de tal manera que el equipo sepa ponerse de acuerdo cuando no se pone de acuerdo”. 

No es grupal, es al sistema

Hacer coaching individual es hacer coaching al relato que durante la sesión comparte la persona, es hacer coaching a sus creencias, a su historia narrada, a lo que dice que ha sucedido, a cómo lo vivió, a lo que siente y a lo que considera que puede o no hacer con esa experiencia. 

Hacer coaching de equipo es algo muy diferente. Hacer coaching de equipo es hacer coaching en vivo y en directo a aquello que está sucediendo en tiempo real entre las personas que conforman el equipo. Hacer coaching de equipo es asistir a las reuniones del equipo, observar y desde esa posición como de «mosca en la pared«, acompañar al equipo en su desarrollo. Ahora bien, hacer coaching de equipo no es liderar al equipo, no es sustituir ningún rol. Es, en todo caso, una labor que ayudará a cada miembro del equipo a ser consciente del rol que están siendo y de cuál debería ser si entre todos quieren lograr resultados extraordinarios.